Agencias | 29/04/2010
El operativo de rescate montado para rescatar al montañero mallorquín Tolo Calafat en el Annapurna ha abandonado esta madrugada las operaciones de búsqueda del alpinista, tras haberlo dado por muerto, ha informado Joan March, amigo y compañero de escalada.
Ni un helicóptero ni un sherpa han podido localizar esta mañana el cuerpo del montañero, quien anoche logró comunicarse con su mujer mediante un teléfono vía satélite desde la falda del Annapurna, el pico himalayo de 8.091 metros de altura que había coronado el martes.
El mallorquín Calafat no pudo finalizar el descenso de la cima del Annapurna, tras la expedición integrada el martes por Pauner, Calafat y Juanito Oiarzabal, por su mal estado de salud. Desde entonces esperaba muy débil a ser rescatado. El helicóptero encargado de su rescate ayer, del ejército de Nepal, no encontró acceso a la zona por culpa del viento y las dificultades metereológicas.
Casi a punto de cumplirse dos años de la muerte en el Annapurna de Iñaki Ochoa de Olza (23 de mayo), otro español, Tolo Calafat, ha perdido la vida a 7.500 metros de altura. No hubo tiempo para más intentos de rescate del mallorquín, que la noche del lunes vivaqueó solo cuando bajaba con sus compañeros al Campo IV. Ni por aire, ni por tierra.
La cordada formada por Calafat, Pauner y Oiarzabal hizo cima en el Annapurna (8.091 metros) el lunes, pero en el descenso surgieron los problemas: Calafat se quedó a 7.500 metros, y Oiarzabal, con pequeñas congelaciones, y Pauner, con pérdida de visión, llegaron al campo IV (7.100 m).
En el campo IV también se encuentra el rumano Horia Colisabanu, quien ya arriesgó su vida por salvar a Ochoa. En una entrevista con la SER de Vitoria, Juanito Oiarzabal reconocía que estaban "agotados", pero que irían a por Tolo.
Juanito criticaba además a la expedición coreana de Oh Eun-Sun, que no había colaborado con ellos. Sin embargo, esta expedición anunciaba que detenía su descenso por si debía colaborar hoy con los españoles en el rescate de Calafat.
D.E.P.