Los datos se han encargado de demostrar que la seguridad en el Mundial requiere cambios. La temporada 2008 pasará a la historia como la que registró el mayor número de caídas de la historia. Nada menos que 876, superando ampliamente las 737 registradas en 2005 y que suponían el tope hasta la fecha.
Estas cifran suponen que ha habido unas 48 caídas por gran premio y unas 16 por categoría en cada uno de los 18 fines de semana de carreras, aunque hay que tener en cuenta que en Laguna Seca sólo rodó la cilindrada máxima y que en Indianápolis 250 no pudo salir por el azote del huracán Ike.
Una de las causas puede ser el hecho de que haya llovido en prácticamente todos los grandes premios alguno de los tres días de competición. También se constata que el cambio de los 990cc a los 800, con el consiguiente aumento de la velocidad en el paso por curva, ha podido influir en estos guarismos. Eso sí, los datos desmontan la teoría de que a mayor avance de la electrónica se reduce el número de accidentes.
Competencia
La fuerte competencia en el desarrollo de los neumáticos en la clase reina también ha ayudado últimamente a que la velocidad aumentase con lo que la introducción del neumático único puede ser una medida que colabore a que los tiempos sean más lentos que en la actualidad, con lo que el número de caídas debería bajar.
Las estadísticas también dejan en evidencia a ciertos pilotos, los que más se han ido al suelo durante todo el año. En MotoGP tal honor ha recaído en Randy de Puniet, quien con 22 caídas encabeza el ránking. En 250 sobresalieron en ese apartado Mattia Pasini y Karel Abraham, quienes con 23 caídas lideraron la tabla. En 125, Jules Cluzel se vio descabalgado de su moto en 19 ocasiones.
La parte positiva de tanta caída hay que buscarla en que no ha habido lesiones de gravedad. Sí es cierto que varios pilotos como Lorenzo, Pedrosa, Hopkins o Capirossi se han perdido varias carreras por estar convalecientes, pero, por suerte, no ha habido que lamentar mayores desgracias. Sistemas como el air fence han actuado muy efectivamente en casos puntuales. Su implantación más otras medidas como mejores escapatorias también han ayudado a la seguridad que se evalúa en cada gran premio los viernes.