Filippo Preziosi es el padre de todas las Ducati Desmosedici y, por tanto, su opinión es muy valiosa a la hora de hablar de los objetivos de la firma italiana para el próximo Mundial de MotoGP. Cinco pilotos de la marca -Canepa, Gibernau, Guareschi, Hayden y Kallio- se entrenaron en Jerez con la que, básicamente, será la moto que afrontará el campeonato, la GP9 con chasis de carbono. Faltó Stoner, que se recupera de la operación a que se sometió y que ya se subió con anterioridad al prototipo.
A Preziosi no le importa que, como muchos apuntan, sea una máquina bellísima, sino que sea competitiva. Y en este sentido todos los pilotos de Ducati coinciden: la GP9 es mejor que la GP8. Sobre el recurso al chasis de carbono, el ingeniero italiano lo tiene claro. "Somos una fábrica pequeña y para derrotar a los colosos japoneses siempre tenemos que correr más riesgos que los demás", asegura en gpone.com.
Preziosi no cree que el paso al monogoma, con Bridgestone como único suministrador de neumáticos, cambie demasiado las cosas. Además, reduce a tres los candidatos al título en 2009: "Rossi, Stoner y Pedrosa". Así que no cuenta con Jorge Lorenzo.