La decisión de Juan Carlos Pastor de no continuar al frente de la Selección la conoció Jesús López Ricondo "en Pekín, un poco antes de que él lo hiciese público, el mismo domingo", con lo que el presidente de la Federación Española deberá decidir en las próximas semanas entre el nombramiento de un seleccionador temporal, o apostar por un contrato de más duración. No es una decisión inmediata, pero sí urge toda vez que España tiene dos partidos internacionales oficiales en octubre (Chipre y Ucrania) de clasificación para el Europeo del 2010, y en enero el Mundial de Croacia.
"Pero también tenemos un proceso electoral de presidente de la Federación Española en el último trimestre del año, y no se puede tomar la decisión de contratar a un seleccionador para un proyecto de cuatro años cuando no se sabe quién va a presidir la Federación", comentaba ayer Ricondo al regreso de Pekín.
Un problema añadido es que los clubes de la Asobal se han comprometido a no permitir a sus entrenadores simultanear los trabajos de club con los de la Selección, con lo cual la posibilidad de contratar a un entrenador de prestigio se reduce drásticamente.
Dado que los partidos del pre-Europeo no parecen exigentes, todo parece indicar que el encargado de dirigir a España sería un técnico de los que están en la nómina federativa. En el Europeo júnior, cuando Villaldea renunció a la Selección por el Portland, el director técnico, Javier García Cuesta, asumió el cargo de ayudante de Francisco Vidal; y ahora parece que sería el propio García Cuesta el seleccionador temporal.