Sebastien Vettel, la nueva revelación de la F-1, se subió por vez primera ayer en Jerez al Red Bull de F-1. Vettel correrá el próximo año con Red Bull en lugar de Toro Rosso, un cambio decidido por Dieter Mateschitz, patrón de ambos teams. Vettel logró el segundo crono de los tests (1'19"878) por detrás de Christian Klien (BMW, 1'19"538), mientras que Sebastian Buemi tomó el Toro Rosso de Vettell y marcó 1'20"209 (3º).
Mientras, Kimi Raikkonen reconoció que necesita "un milagro" para recuperar los 21 puntos que le lleva Hamilton o los 20 que le lleva su compañero Massa en el campeonato. "Esto aún no ha terminado, pero haría falta un milagro, similar al que necesitaría para caiga un rayo dos veces en el mismo punto. Este deporte puede ser duro de digerir. Aprietas, das lo máximo... pero a veces parece que las cosas nunca salen como deben. Hace mucho que no llegan las victorias y la serie de carreras con cero puntos se eterniza. No hay que ser Einstein para darse cuenta de que así no se lucha por el título". Kimi podría ahora ayudar a Massa