Vendee Globe Vuelta al Mundo en solitario...

 
 


La Vendée Globe 2008/09, la vuelta al mundo en solitario y sin escalas, se puso ayer en marcha con los 30 osados participantes que fueron despedidos por más de 300.000 personas en la localidad francesa de Les Sables d"Olonne. La lluvia fue también la protagonista y también lo fue una pequeña tregua en el temporal que les espera en las próximas horas en el mar Cantábrico.

En la salida el viento soplaba sobre los 15 nudos, pero a medida que fue avanzando el día y a primera de la noche la previsión es que fuera subiendo; estaba previsto en estas primeras horas superara los 35 nudos, con lo que el inicio de la vuelta al mundo en solitario será como ya viene siendo habitual, duro y sobre todo muy intenso.

La anécdota estuvo en que el único español participante en esta Vendée Globe, el vasco Unai Basurko, a los mandos del Pakea Bizkaia. Cruzó primero la línea de salida amurado a estribor, después de que Mike Golding, con el Ecover, que iba justo delante suyo, hiciera fuera de línea y tuviera que volver a salir. El resto de la flota salió a babor, con lo que la táctica del vasco y el británico fue la de salir hacia el sur y el resto hacia el norte.

Tras las primeras millas recorridas, el Safran de Marc Guillemot lideraba la flota tras recorrer las primeras 37 millas y después de que en los primeros compases fuera Sebastién Jossé, a la caña del BT, el que estuviera en cabeza durante las primeras cuatro horas. La segunda posición, prácticamente navegando a la altura de Guillemot, se encontraba a última hora de ayer Kito de Pavant (Groupe Bel) y la tercera se la disputaban a casi una milla de los dos primeros Roland Jourdian (Veolia Environnement), Michel Desoyeux (Foncia) y Jean-Pierre Dick (Paprec Virbac 2).

A primera hora de la noche las posiciones variaron y más con la entrada del frente a medida que la flota se acercaba a Finisterre. El vencedor de la última edición, Vicent Roiu (PRB), ocupaba la 10ª posición a 1.8 millas del Safran y Unai Basurko era 25º a 13.1 millas, pero con toda la vuelta al mundo por delante.

AUPA UNAI BASURKOOOOOOOO

La vendée globe tiene una réplica en Internet



El miércoles 170.000 personas ya habían jugado en la versión virtual de la vendée globe, una regata en solitario que se realiza cada cuatro años y cuyo desafío consiste en dar al vuelta al mundo sin escalas ni asistencias.Mientras en la regata real sólo 30 participantes salieron del puerto de Les Sables d' Orlonne el mes pasado desde la costa atlántica de Francia, los productores del juego estiman que la fantasía es extremadamente popular debido a que el evento deportivo cuenta con bastantes aficionados.

Bilbao.-  El navegante vasco Unai Basurko (Pakea Bizkaia) ha confirmado oficialmente su retirada de la Vendée Globe a causa de la rotura en la caja del timón de estribor que sufrió el pasado jueves, según ha anunciado la organización de la vuelta al mundo en solitario sin escalas ni ayuda externa.


El navegante Unai Basurko, en el "Pakea Bizkaia", con el que ha participado en la regata de vela en solitario más importante del mundo, la Vendée Globe.

Basurko, que se encontraba posicionado en latitud 32 Sur 7 Oeste, notificó su decisión a los organizadores a las 12:34 de hoy tras comprobar la imposibilidad de reparar los daños en el mar e informó además que se disponía a poner rumbo norte para encontrar el impulso los vientos alisios.

"No quiere ir más al sur en estas condiciones porque sería peligroso para el barco", señala la Vendée Globe, quien trasladó además los "mejores deseos" del patrón para el resto de competidores y expresó su esperanza "de que no se enfrenten con estos problemas".

Próximo objetivo Puerta Este de Australia

Jean-Pierre Dick parece que ha solucionado la avería

El líder apunta a la Puerta Este de Australia, mientras que Jean-Pierre Dick parece que ya soluciono la avería de los timones

Michel Desjoyeaux sigue imponiendo su ritmo en la Vendée Globe, un ritmo que por ahora solo le sigue Roland Jourdian a unas 30 millas en segunda posición. En el último parte de posiciones, de hoy a las 05:00 GMT, el Foncia de Desjoyeaux navegaba a unos 20 nudos de velocidad, cinco nudos más que el Veolia de Jourdian.

 

El próximo objetivo del grupo de cabeza de la flota es la Puerta Este de Australia, situada en el paralelo 52º Sur, y entre los meridianos 136º Este y 147º Este, a unas 805 millas al norte de la Antártida y a 670 millas de la isla australiana de Tasmania.

 

Foncia la tiene a unas 343 millas  a proa, esperando que la cruce en menos de 24 horas con el ritmo que está llevando. En la última jornada recorrió 368,4 millas en 24 horas. Y las condiciones meteorológicas auguran más viento en la zona, como referencia los 20 nudos del Foncia de esta madrugada.

 

Roland Jourdian debe de estar cruzándose los dedos a bordo del Veolia. En la anterior edición de la Vendée Globe, por estas fechas, se tuvo que retirar por vía de agua en la caja de la orza, dirigiéndose a Nueva Zelanda, y en la pasada Barcelona World Race rompió el mástil después de hacer una parada técnica en las Kerguelen para reparar el motor. Y ayer a punto estuvo de pegarse un “tortazo” en una planeada.

 

Hay un hueco de unas 90 millas entre los dos primeros, en tercera y cuarta posición navegan Sébastien Josse con el BT y Jean Le Cam con el VM Matériaux. Prácticamente haciendo la misma ruta, tan solo separados por una 17 millas de latitud, más al sur Le Cam. Y a más de un día de navegación del Foncia se sitúan Armel Le Cléac´h con el Brit Air, Vincent Riou con el PRB, Marc Guillemot con el Safran, Yann Eliès con el Generali y Jean-Pierre Dick con el Paprec-Virbac. Manteniéndose en la decima posición Samantha Davies con el Roxy a 958 millas del primero.

 

En el cumulo de averías, y abandonos de los últimos días, se encontraba el Paprec-Virbac de Jean-Pierre Dick con un grave problema en la sujeción del timón de estribor, que en esos momentos le tocaba estar en sotavento. Para poder ver el alcance de la avería, y poder hacer una reparación de emergencia, Jean-Pierre se dirigió hacia el norte para que el barco no estuviese expuesto a los fuertes vientos y poder navegar con el barco más plano con el timón de babor. En el último parte de posiciones, en noveno lugar, se ve que su ruta es ahora hacia el este / sureste, y navega a unos 12 nudos de velocidad, lo que indica que el Paprec-Virbac ya está en condiciones de competir.


Dury alonso.

 
 
 
Yann Eliès, uno de los participantes en la Vendée Globe, se ha roto el fémur de la pierna izquierda. Se encuentra al sur de Australia, a unas 800 millas de distancia (más de 1.400 kilómetros) de la costa y, naturalmente, la fractura no le permite llevar a cabo ninguna maniobra en su barco.

Sufrió el accidente en la mañana del jueves, cuando se encontraba en cubierta, a proa, preparado para cambiar una vela, y el barco sufrió un brusco frenazo al chocar contra una ola. El impacto hizo que el navegante francés se golpeara contra el balcón de proa y que la pierna se le quedara enganchada. Tuvo que volver arrastrándose al interior del velero y desde entonces no sólo apenas puede moverse sino que el propio servicio médico de la organización de la regata le ha aconsejado, vía telefónica desde Francia, que se mantenga lo más quieto posible para evitar que, si existe alguna hemorragia interna, ésta vaya a más.

Según ha explicado el herido en alguna de las comunicaciones, al final pudo alcanzar el botiquín de a bordo la misma mañana del viernes, después de muchas horas de soportar un intenso dolor. El barco navegaba en el momento del accidente con tres rizos en la mayor y trinqueta en proa y esa combinación de velas pequeñas ha facilitado que se mantenga a la capa desde entonces, es decir con el aparejo recibiendo el viento a la contra y derivando lentamente.

La ayuda ya está en camino. La marina australiana hizo zarpar la fragata HMAS Arunta, de 118 metros de eslora, que puede alcanzar hasta 30 nudos de velocidad máxima y que prevé llegar a la zona durante la tarde del sábado. Como es lógico, el barco de guerra dispone de una enfermería ampliamente dotada, pero la dirección de la Vendée Globe no pudo confirmar si además cuenta con un helicóptero que pudiera acelerar el rescate.

Al igual que ha ocurrido en el pasado con ocasión de otros accidentes en esta ya mítica regata de solitarios alrededor del mundo, otros de los participantes ofrecieron inmediatamente su ayuda para acudir en apoyo de Eliès. Marc Guillemot, también francés y bretón al igual que el herido, navegaba por delante de Eliès en el momento en que éste sufrió el accidente, pero era el barco más cercano de toda la flota y viró sin dudarlo para ir en su busca. Llegó en la tarde de ayer y desde entonces mantiene su barco, el Safran, a menos de una milla del Generali de Eliès y habla con el herido por medio de la radio vhf.

Poco más puede hacer que ayudarle a mantenerse sereno y animado hasta que llegue la fragata australiana. El viento y las olas de cuatro metros de altura no permiten plantearse siquiera la posibilidad de abarloar los dos barcos en medio del océano. En esas condiciones es muy probable que la jarcia (los cables que sujetan el palo) de los dos barcos se enganche y que ambos queden seriamente averiados.

Guillemot ha explicado que ya ha hecho un intento de pasar por la popa del Safran para arrojar hacia el barco de su compañero una botella de agua con analgésicos y algunos víveres, pero el intento finalizó con un paquete en la bañera del Generali, donde Eliès difícilmente podrá alcanzarla, y otro en el agua. Con todo, la maniobra sirvió para que Guillemot pudiera ver la mano de Eliès saludándole desde el interior mientras hablaban por la radio y eso ha animado a los dos amigos.

Otro de los rivales-compañeros de Eliès, la británica Samantha Davies también navega a buena velocidad hacia la zona. A mediodia de hoy, viernes, se encontraba a una 250 millas de distancia y mantenía un ritmo de unos 16 nudos de velocidad en su barco, Roxy. Es previsible que llegue en la madrugada del sábado para colaborar con Guillemot en el esfuerzo por mantener alta la moral de Eliès.

Tanto Guillemot como Davies han declarado que reanudarán la regata cuando Eliès sea rescatado.


Suso Pérez.
 

Suso Pérez | 06/01/2009



 
Jean Le Cam, uno de los participantes en la Vendée Globe, ha volcado con su velero, VM Matériaux, cuando se encontraba a unas doscientas millas al oeste de cabo de Hornos. El navegante francés, que ocupaba la tercera posición en la regata de solitarios alrededor del mundo, se encuentra dentro del barco volcado y ha conseguido dar señales de vida al exterior.

Otro de los regatistas, Vincent Riou llegó al lugar donde ocurrió el vuelco y pudo oír la respuesta de Le Cam a través del casco de la embarcación tras llamarlo repetidamente. Hasta entonces nadie sabía qué había sido del navegante accidentado.

Un avión de la armada chilena ya había sobrevolado el barco volcado y lo había fotografiado, sin poder localizar a Le Cam. Las imágenes tomadas desde el aire permiten ver que en el extremo de la quilla falta el pesado bulbo que sirve de contrapeso al enorme plano vélico de los Imoca Open 60 y eso explica que el barco haya volcado sin posibilidad de adrizarse de nuevo.

Después de que el avión chileno avistara al VM Matériaux, un petrolero de 270 metros de eslora, el Sonagol Kassanje, se dirigió a ese punto, pero, una vez allí, el estado de la mar, con olas de entre cuatro y cinco metros de altura, le impidió poner en el agua una embarcación para acercarse al velero.

El petrolero hizo sonar repetidamente su sirena de niebla y, como si fuera una respuesta, se activó entonces en el VM Matériaux una segunda radiobaliza de emergencia. Pero hasta que llegó Riou a bordo del PRB no se pudo confirmar que Le Cam estaba vivo y dentro de su barco. Además de responder a los gritos de Riou, Le Cam pudo también sacar al exterior una pequeña bandera de señales a través de uno de los pasacascos del barco y eso confirmó que se encuentra bien.

Armel Le Cléac"h, a bordo del Brit Air, también ha llegado ya al lugar y ahora los dos regatistas y el petrolero se mantienen en la zona a la espera de la llegada de un remolcador chileno que ha zarpado de Puerto Williams con una embarcación semirígida y un equipo de buceadores a bordo y que se espera que llegue en la madrugada del miércoles.

Los barcos de regatas oceánicos disponen de una escotilla de escape en la popa precisamente para que los navegantes puedan abandonar la embarcación en situaciones similares a esta, pero cabe en lo posible que Le Cam no pueda acceder a ella o que tenga que sumergirse para alcanzarla, con lo que, si no ha conseguido ponerse el traje de supervivencia, tendría que tener muy claro cuáles son las condiciones de ayuda en el exterior para meterse en un agua helada que seguramente ya habrá hecho penosas las condiciones en el interior de la cabina.

El accidente de Le Cam deja en trece el número de regatistas que siguen compitiendo en la Vendée Globe de los treinta que zarparon de Les Sables d"Olonne, en la costa atlántica francesa, el pasado 9 de noviembre. Pese al notable número de bajas por averías o roturas del material, sólo Yann Eliès debió ser también rescatado al romperse una pierna durante una maniobra en cubierta cuando navegaba al sur de Australia.

Todos los demás han conseguido alcanzar algún puerto por sus propios medios. Ahora mismo, Jean-Pierre Dick, vencedor de la Barcelona World Race, navega rumbo a Nueva Zelanda, a donde también se dirige Jonny Malbon, los dos retirados ya de la regata.

Por delante, , Michel Desjoyeaux, líder sólido tras su impresionante remontada después de retrasarse en la salida, y Roland Jourdain, segundo, a 100 millas de distancia, navegan ya en el Atlántico, en la inmediaciones de las islas Malvinas. La batalla táctica entre ambos puede despertar a partir de ahora una emoción deportiva que a lo largo del Índico y el Pacífico ha estado más supeditada a las averías que a las estrategias.
 




Suso Pérez | 07/01/2009

 
Jean Le Cam, el navegante de la Vendée Globe que se encontraba en el interior de su barco volcado a doscientas millas de cabo de Hornos, ha sido rescatado por su compañero y rival en la regata Vincent Riou. Riou, a bordo del PRB, y Armel Le Cléac'h, en el Brit Air, permanecían en el lugar donde se hallaba el VM Matériaux de Le Cam junto con el petrolero Sonagol Kassanje a la espera de que llegara un remolcador chileno con buceadores a bordo. Pero finalmente los hechos se precipitaron y tuvieron un final feliz.

Jean Le Cam, que se encontraba en un burbuja de aire en la proa de su velero volcado, pudo acceder finalmente a la escotilla de escape en la popa y salir al exterior. Riou, que se turnaba cada hora con Le Cléac'h para vigilar permanentemente el VM Matériaux para que no se diera el caso de que Le Cam saliera y nadie pudiera ayudarle, obervó cómo se abría la escotilla y, después de que varias cajas fueran arrojadas al exterior, aparecía finalmente Le Cam.

Según su propio relato, Riou vio a Le Cam encaramarse al casco de su barco y agarrarse a una de las palas de timón, pero, dado lo sumergida que se encontraba la popa del VM Matériaux, el cuerpo de Le Cam quedaba bajo el agua en el paso de cada ola, así que se decidió a actuar. Con su motor averiado desde hace días, Riou tuvo que efectuar varios intentos de pasar a vela lo más cerca posible del barco volcado para arrojar un cabo a Le Cam, a quien le pidió que no saltara hasta que no tuviera cogido el cabo.

Lo consiguieron al cuarto intento. Riou hizo pasar el PRB tan cerca del VM Matériaux que golpeó su outrigger de babor (las perchas que llevan algunos Imoca Open 60 para sujetar los obenques del mástil lejos del casco y que vienen a ser como dos tangones que salen perpendiculares desde ambos costados del barco) con la quilla del barco volcado. Pero, mientras se oía un crac en el encuentro de los dos barcos, Le Cam atrapó el cabo, se lo amarró a la cintura y Riou haló de él rápidamente ayudándose con un winche de su velero para subirlo a la bañera del PRB.

Tan pronto como Le Cam estuvo a bordo, los dos navegantes comprobaron que el outrigger golpeado del PRB estaba seriamente dañado y que el mástil ya se había inclinado al menos 30 grados bajo la fuerza del viento. Ante el peligro de desarbolar, los dos hombres hicieron una rápida virada, maniobra que Le Cam definió con lógica alegría y humor como "la más bella trasluchada que hemos hecho en nuestra vida", para hacer que el outrigger sano sostuviera el palo. Después, afirmaron en lo posible el outrigger averiado y se alejaron lentamente del lugar, con tres rizos en la mayor y ninguna vela a proa, mientras Le Cléac'h se acercaba con el Brit Air para disfrutar con ellos de la alegría por el éxito de la maniobra de rescate.

Cuando se supo que Riou lo había conseguido y Le Cam estaba a salvo y sin daños a bordo del PRB, la operación de rescate de la armada chilena se suspendió y el remolcador viró para volver a puerto. También el petrolero reanudó su viaje interrumpido. De momento no se ha tomado ninguna decisión sobre dónde desembarcará Riou a Le Cam, aunque el patrón del PRB ha manifestado su deseo de reanudar la regata y alcanzar la meta en Les Sables d"Olonne, pese a las dudas que suscita la avería de ese outrigger golpeado.

Le Cléac'h, por su parte, está ya en regata de nuevo -de hecho, ha pasado cabo de Hornos en tercera posición tras estas vicisitudes vividas por el vuelco de Le Cam- y ha comentado que los tres amigos y rivales tienen una cita para tomarse unas cervezas cuando vuelvan a reunirse en el pequeño puerto francés que organiza la Vendée Globe.



 

¡¡Fuerza 11!! Tres de los participantes en la Vendée Globe que se encuentran en las inmediaciones del cabo de Hornos han sido avisados del formidable temporal que se abatirá sobre la zona en pocas horas. Météo France prevé que alcance fuerza 11 en la escala Beaufort, esto es, vientos de entre 56 y 63 nudos (103-117 km/h), con rachas que podrían subir hasta unos espeluznantes 85 nudos (más de 150 km/h). Y eso en uno de los lugares del mundo más temido por los marinos. Brian Thompson, Arnaud Boissières y Dee Caffari son los tres regatistas que están en el lugar.

El primero, que ocupa la sexta posición en la clasificación, está ya en el Atlántico mientras que los dos siguientes están justo a punto de alcanzar el cabo, con el francés Boissières unas 60 millas por delante de la británica Caffari. La situación de Dee Caffari, quien junto a la también británica Samantha Davies son las dos mujeres que toman parte en la actual edición de la vuelta al mundo en solitario y sin escalas, es especialmente delicada puesto que lleva la vela mayor rota tras el último de los temporales sufridos en el Pacífico, a comienzos de esta semana.

La organización de la regata ha sugerido a los tres navegantes que intenten protegerse a sotavento del extremo de Tierra de Fuego, puesto que la situación en el estrecho de Le Maire (entre la isla de los Estados y la punta sur del continente americano, justo después de Hornos) será, según el parte de Météo France, "infranqueable", con el viento soplando del norte y el mar formando olas de hasta 11 metros.

La escala Beaufort, que mide la intensidad del viento y su efecto sobre la superficie del mar, consta de doce grados, esto es, hasta fuerza 12. Fue creada por el almirante británico Francis Beaufort en 1806 para dotar a la armada de una referencia que permitiese definir las condiciones de navegación y, dada su utilidad, fue adoptada en 1874 por el Comité Meteorológico Internacional. Esta es la descripción de las condiciones que se pueden esperar con fuerza 11, considerado temporal muy duro: "Olas excepcionalmente grandes (los buques de pequeño y mediano tonelaje pueden perderse de vista). La mar está completamente cubierta de bancos de espuma blanca extendida en la dirección del viento. Visibilidad muy reducida".

Por delante del trío que se dispone a afrontar estas condiciones dantescas, Marc Guillemot, quinto en la clasificación, ya ha dejado atrás las islas Malvinas, donde efectuó una recalada de siete horas en la bahía de Stanley, delante de la capital del archipiélago, para reparar el carril de su vela mayor, que le ha dado problemas desde el momento en que se mantuvo a la capa junto al barco de Yann Eliès mientras esperaban la llegada de la fragata australiana que finalmente rescató al marino que se había roto una pierna.

Desde entonces, Guillemot ya tuvo que efectuar una primera recalada en una pequeña isla inhabitada al sur de Nueva Zelanda para intentar arreglar ese carril. Su ayuda a Yann Eliès ha sido compensada por la organización con 82 horas, a descontar del tiempo que marque a su llegada a Les Sables d"Olonne.

También Samantha Davies, cuarta actualmente, ha sido bonificada con 32 horas. Aunque no llegó a tiempo a la posición en que se encontraba Eliès, la organización entiende que desvió su rumbo para ayudar al herido y la ha compensado por ese retraso. En este sentido, la situación más singular es la de Vincent Riou, quien se vio obligado a retirarse de la competición y a ser remolcado por una patrullera de la armada chilena a Puerto Williams debido a la avería de su barco tras rescatar a Jean Le Cam. Riou reclamó que su caso no se podía considerar abandono puesto que se debía directamente a las consecuencias del choque en la maniobra de salvamento y el jurado internacional de la regata, del que forma parte el español Ion Echave, le ha dado la razón. Oficialmente mantendrá la tercera posición, la que ostentaba en el momento en la que la organización le pidió que socorriera al marino del VM Matériaux atrapado dentro de su barco volcado, aunque será una clasificación excepcional y ex aequo, puesto que no afectará a las posiciones reales y a los premios de los competidores que lleguen a Les Sables d"Olonne.

Armel Le Clèac"h, a su vez, ha sido compensado con 11 horas por haber participado también en la ayuda a Jean Le Cam. Ahora mismo es tercero, a 700 millas del líder.

En cabeza de la regata, y ya disfrutando de condiciones tropicales a la altura de la costa de Brasil, sigue Michel Desjoyeaux, con 270 millas de ventaja sobre Roland Jourdain, segundo, quien ha debido realizar una minuciosa y complicada reparación en el Veolia Environment debido a las grietas que la tensión de la jarcia había abierto en un mamparo en el interior del barco y que de momento ha conseguido atajar atornillando sobre ellas grandes planchas de fibra de carbono que llevaba en reserva.
 
Suso Pérez.