VOLVO OCEAN RACE

Nadie esperaba que fuese tan pronto, pero la regata más dura del mundo le dio ayer el primer disgusto al Telefónica Azul, una de las naves españolas que participa en la Volvo Ocean Race. Apenas habían transcurrido 20 millas cuando la embarcación patroneada por el holandés Bouwe Bekking sufrió una avería en el sistema de gobierno. Este percance le dejó con único timón útil, obligando a la embarcación a navegar más despacio durante unas seis horas. Finalmente, el equipo se vio obligado a realizar una parada de chequeo en Algeciras para adentrarse en el Océano Atlántico con todas las garantías, con la consecuente penalización de 12 horas. "¡Qué día para empezar! Llevábamos una velocidad muy buena, pero de repente escuchamos una especie de crack", comentó Bouwe Bekking.



Si todo se solucionaba a tiempo y tras cumplir la penalización impuesta por tocar tierra, el Telefónica Azul tenía previsto reemprender la regata la pasada madrugada. Por otro lado, el Ericsson 3 y el 4 surcaron como primeros el estrecho de Gibraltar.

Los ocho Volvo Open 70 están a punto de adentrarse en el paralelo 6º Norte de Latitud, inmersos en las calmas ecuatoriales y con la tensión a flor de piel.

Aunque la opción Oeste haya rendido generosos beneficios al Green Dragon, no puede generalizarse que sea así para todos. El capricho de las calmas ecuatoriales se ha puesto de manifiesto y sus famosos “pasillos” no están siendo una excepción a esta Volvo Ocean Race 2008-09. La mejor prueba de ello la tenemos con la evolución del Telefónica Negro, que viniendo desde atrás esta haciendo una velocísima ruta entre los Puma y Ericsson 4, situados a su Oeste, y los Telefónica Azul y Ericsson 3, que navegaban más al Este, hasta hace unas horas, y actualmente más alineados.

Pero esto apenas ha comenzado, pues navegando a unos 7 nudos de velocidad les quedan muchas horas hasta cruzar la zona de calmas ecuatoriales, y aún quedan muchas cosas por suceder. Cuando el abanico de de viento es tan amplio, como sus direcciones 102º al 25º ó su intensidad entre 9 y 4 nudos, que indicaba el último parte de posiciones, se entenderá la inestabilidad de la zona. Por supuesto que hay una parte lógica para aprovechar el viento que se tiene, pero difícilmente se puede elegir cuál es el viento que se tiene, y es difícilmente previsible. Por tanto, la paciencia y la lucha constante de las tripulaciones, para no escatimar un cambio de vela que permita cualquier aceleración, es lo que puede ayudara sortear con mayor o menor rapidez esta temible zona.

Una zona a cruzar, y eso implica por donde entrar, como navegar por ella… pero también como salir, pues el efecto acordeón favorece a los últimos que entran… y a los primeros que salen. Y lo importante es como termina el cruce de las calmas ecuatoriales, no como empieza. Paciencia, pues.

ANALISIS DE LA SEGUNDA ETAPA.

El próximo sábado la flota tomará la salida de la segunda etapa de la Volvo Ocean Race 2008-09. Una etapa que abre posibilidades para todos; una etapa desconocida en la que adentrarse. Todos parten de cero.

Llegamos ya a la segunda etapa de la Volvo Ocean Race 2008-09, 4.450 millas que saliendo de Ciudad del Cabo se adentrará en el océano Índico para llegar a Cochi, India.

Por delante muchas opciones tácticas en un recorrido que tiene como meta volante el cruce –del Oeste al Este- de la línea vertical situada 20.00.00 S, 58.00.00E, denominada meta volante de isla Mauricio. Novedad en esta etapa es la zona de exclusión a la navegación desde las inmediaciones de isla Mauricio hacia la zona Norte de la costa africana, con el fin de evitar posibles incidentes por piratería que afecten a la seguridad de la flota.

La salida está prevista, pese al mal tiempo que impera en Ciudad del Cabo con vientos que han superado los 50 nudos, para el sábado 15 a las 13.00 horas.

La flota de la Volvo Ocean Race podrá realizar un recorrido costero antes de poner rumbo al Cabo de Buena Esperanza, que les llevaría a rodear un par de balizas frente a la Table Mountain, referente de la ciudad.

El análisis de la etapa se presenta algo imprevisible. Lo lógico es que la flota salga de Ciudad del Cabo ciñendo hasta haber pasado el mítico cabo de Buena Esperanza. No es probable que la flota bordee la costa africana una vez pasado este punto, ya que la corriente de Anghilas se deja notar hasta cerca de 200 millas de la costa.

Por lo tanto, lo lógico, si persiste la baja presión al Sur, es que la flota busque irse al Sur-Suroeste en un camino que pese a ser más largo, tiende a dar resultados a largo plazo. La opción que se presenta más normal es la de salir de la zona de corriente ir dirigirse al Oeste para poder entrar en las series de baja presión.

Según bajen más o menos, luego tendrán mejor rumbo para subir, tras haber trasluchado. aunque en un principio hagan más millas.

El tema aquí es: cuanto bajar? Bajar hasta el 39S, bajar hasta el 41S? La respuesta sin duda está en la baja presión que amenaza esa zona y poder bordearla dependiendo de su localización.

No será hasta el tercer día de regata cuando comencemos a ver quien de los que hayan apostado por el SW comienza a recortar y querer subir. Si la segunda etapa de la Volvo Ocean Race tiene una longitud de 4.450 millas, con la ruta Sur –en la que en los primeros días todos harán sólo rumbo Este- la medición estimada de la etapa es de cerca de 6100 millas. Una ruta con casi un 15% más de millas por recorrer que lo que llevaría la línea recta.

Si la primera pregunta de esta etapa es: ¿cuanto debemos bajar?, la segunda sin duda es: ¿cuando comenzar a subir hacia el Norte?

“La meta volante presenta varios retos”, comenta Salter, “”Vas a por los puntos o, es un buen momento para poner rumbo más al Norte?. Decidirías arriesgar a perder algunas posiciones por ir hacia la puerta y luego al Norte?”.

Una vez que la flota se plantee en que momento quiere recortar para ir al Norte, se encontrarán con los Doldrums.

Esta vez los Doldrums se presumen mucho más grandes de los que encontró la flota en la primera etapa. Si en el Ecuador los Doldrums se sitúan entre el 5N y el 10N, aquí son prácticamente el doble, yendo del 0N al 5N en una franja y en otra inferior, del 5S al 10S., pudiendo llegar a ocupar una superficie de más de unos cientos de millas.

“En el Océano Indico los Doldrums se hace dobles”, comenta el metereólogo Bedford, “además de la banda superior encontramos otra al Suroeste de Sri Lanka, donde los vientos del Noreste de los monzones chocan con los suaves vientos alrededor del Ecuador. Sin duda alguna, en este área será donde aparezcan los vientos más ligeros”.

Tras haber pasado la crítica zona de las calmas, donde presumiblemente la flota se reagrupe, habrá que plantearse la aproximación a Cochi. Nada fácil en un principio debido a lo ligero de los vientos del NE –monzones- en esta época.

Lo único claro en el viernes al mediodía es que las dos bajas presiones que se están formando al Sur podrían propiciar una más que rápida travesía –por lo menos hasta los Dolrums- con posibilidades de volver a hacer añicos el record que por el momento ostenta el Ericsson 4 de Troben Grael. Por el momento, el monocasco más rápido del mundo en 24 horas.

UNA DE PIRATAS



El lema de la Volvo Ocean Race es “Life at the Extremme” y cuando hablamos de ello no nos referimos sólo a las duras condiciones de navegación.

Hablar de piratería, incidentes en alta mar u otros hechos hostiles para la navegación no es extraño en pleno siglo XXI. Las tripulaciones de los ocho Volvo Open 70 han tenido una mañana peculiar, con una extensa reunión con los Directores de la Regata.

La nueva ruta de la Volvo Ocean Race 2008-2009 incluye por primera vez Asia –Etapas 2 (Ciudad del Cabo-Cochi), 3 (Cochi-Singapur) y 4 (Singapur-Quindao)- y esto ofrece a los equipos de la Volvo algunos desafíos más de los que uno a primera vista podría pensar.

La flota tiene ante si 4450 millas que les llevarán a India. El océano Índico les espera, pero esta vez habrá que añadir algún elemento más. En principio los hechos hostiles a los que la flota de la Volvo Ocean Race se puede enfrentar son 4 diferentes: un denso tráfico de multitud de pequeñas embarcaciones pesqueras, piratería, tráfico humano ilegal o terrorismo marítimo.

Aunque los dos últimos son bastante improbables, el riesgo en esta segunda etapa de la Volvo Ocean Race 2008-09 se centra en la piratería en forma de pequeños pesqueros que faenan a apenas cientos de millas de la costa, o reducidos grupos delincuentes que una vez que avistan barcos desde la costa salen en su búsqueda.

Uno de los hechos también a tener en cuanto con los pescadores de la zona es no el hecho de la piratería, sino que muchos de estos pescadores se acercan intentando interrumpir la marcha de aquellos a los que se aproximan en busca de bebidas, tabaco o comida.

Jack Lloyd, Director deportivo de la Volvo Ocean Race 2008-09 comentaba: “El objetivo de esta reunión ha sido facilitar toda la información que tenemos sobre posibles incidentes y las soluciones que tenemos para solventarlo a todos los equipos. Hemos querido dejar claro la diferencia entre la piratería y los pequeños pesqueros que se acercan a vender pescado o pedir bebida y tabaco. Lo que queremos es alertar a las tripulaciones de lo que se van a encontrar”.

Para fortalecer la seguridad en estas etapas, se han tomado una serie de medidas que mantendrá a la flota a salvo. La etapa de Ciudad del Cabo a Cochi (India) tendrá una zona de exclusión en la que los participantes no podrán adentrarse. La zona de exclusión, debido a temas de seguridad, está marcada por la Latitud 20.00.00S y la Longitud 58.00.00E. y alejará a la flota de las zonas más conflictivas del continente africano.

Sobre las zonas de peligro, Lloyd explicaba: “Vamos a dejar apartadas de la ruta las zonas de gran peligro en esta segunda etapa, ya que tenemos una zona de exclusión que hará que los barcos no entren en la zonas conflictivas, como la costa de Somalia”.

Con esta zona de exclusión los Volvo Open 70 quedarán a más de 600 millas de la costa africana, y especialmente del área de Somalia. Aunque la zona de Somalia es conocida por ser base de operaciones de piratas, esta zona de exclusión no permitirá que la flota de la Volvo Ocean Race se acerque.

Más al Norte, los equipos se tendrán que mantener alerta por un motivo similar. Las pequeñas embarcaciones pesqueras que faenan en estas aguas del océano Índico presentan dos peligros.

Fernando Echavarri, patrón del Telefónica Negro comentó tras las reuniones informativas para los equipos: “Es realmente importante conocer como debemos actuar ante un hipotético caso de piratería. Hemos aprendido sobre cuales son los lugares potencialmente peligrosos y lo que tenemos que hacer o no hacer ante un problema, pero lo que es realmente importante es aprender todo lo que podamos antes de salir. Lo mejor es la prevención. No hay que ser paranoico con esta etapa, tan sólo hay que tener presente cuales son riesgos potenciales y que hacer en cada caso, nada más. Nosotros tan sólo somos regatistas”.

Por una parte, una gran concentración de estas embarcaciones de pesca puede significar un ataque encubierto, con motoras fueraborda que parten de los barcos nodriza una vez que la flota ha rodeado a su presa, por otro lado, la mayoria de las veces no presentan peligro..

Pero la flota de la Volvo Ocean Race no estará sola, sino que además de las zonas de exclusión creadas para mantener a los 8 equipos alejados de los peligros, los barcos continuarán siendo monitorizados cada pocos minutos –como en cualquier etapa- en el Cuartel General de la Volvo Ocean Race. Además se pasarán los informes de posiciones detallados de cada uno de ellos, a la armada que patrulla por el Indico y en entre la que están diversas embarcaciones de la OTAN, para su constante localización.

En caso de peligro las embarcaciones de la armada de diferentes países, presentes en el área, estarán prestas a ayudar al que lo solicite.

Las reuniones de seguridad a las que ha acudido los regatistas de los diferentes equipos ha tocado temas tan amplios como: los hechos hostiles en los que podría caer la flota en su ruta hacia Asia, las medidas de protección que se deben de tomar, como evitar y/o enfrentar incidentes o consideraciones tácticas, además sobre todo, de como hacer la travesía lo más segura posible.

ACTUALIZADO A LAS 07:00 GMT: ERICSSON 3 CRUZA LA META VOLANTE.

 Es un gran día para el equipo Ericsson ya que el Ericsson 3 de Anders Lewander ha sido el segundo barco en cruzar el 58E. y por lo tanto se anota 3,5 valiosos puntos.

Los de Anders Lewander, situados en la zona central del flota, han cruzado la línea a las 06:51 GMT

ACTUALIZADO A LAS 5.00 GMT.

El Ericsson 4 lo ha vuelto a hacer. El líder de la clasificación general de la Volvo Ocean Race y al día de hoy el monocasco más rápido del mundo se ha anotado los 4 puntos que ofrece la meta volante de la segunda etapa, Ciudad del Cabo-Cochin.

Los de Torben Grael como patrón y Jules Salter como navegante han cruzado el 58E a las 0340 GMT

El E4, como se le conoce al Ericsson 4, ha sido el competidor que más al Sur ha cruzado la meta volante, con una posición cercana al 39S y en condiciones de viento del Este-Sureste que le hacen avanzar en un rango de viento de unos 20 nudos.

Las condiciones en la flota son bastante similares en la flota, que va bastante compacta. Tras los de Torben, todo hace presagiar que sus hermanos pequeños a bordo del 3 sean los siguientes en pasar de Oeste a Este, esta línea imaginaria que marca la meta volante.

Tan sólo 5, 5 puntos separan al segundo clasificado del sexto en la clasificación general. El Telefónica Azul de Bekking/Martinez cuenta con 19 puntos, uno más que el americano Puma de Ken Read, mientras que el equipo chino-irlandés del Green Dragon de Ian Walker se queda a popa de este último por tan sólo 2 puntos.

El equipo ruso ha invertido casi cuatro días más que el ganador de la etapa, el Ericsson 4, que cruzo la línea de llegada el sábado 29 de noviembre a las 22:52GMT. El equipo ruso continúa como farolillo rojo de la clasificación general de la Volvo Ocean Race, mientras el barco de la multinacional sueca Ericsson, del patrón brasileno y cinco veces medalla olímpica Torben Grael, lidera desde la misma primera etapa.

Pero que nadie se confunda, si el liderato al día de hoy se denomina alto y claro Ericsson 4, pese a que no hay nada decidido y la Volvo Ocean Race discurra en su segunda etapa, el resto de la flota está en un puño.

El Ericsson 3, de Anders Lewander y con una tripulación enteramente nórdica, ocupa la quinta posición con tan sólo un punto de diferencia sobre el Telefónica Negro de Fernando Echávarri.

Y es que entre los dos hermanos del equipo Telefónica (la segunda posición para el “Azul” y la sexta para el “Negro”) solo hay 5,5 puntos.

La séptima plaza es para el Delta Lloyd del recién incorporado a la Volvo Ocean Race 2008 Roberto Bermúdez de Castro y el farolillo rojo recae en manos del equipo ruso. Estos dos equipos se encuentran empatados con 7,5 puntos.

Clasificación Volvo Ocean Race (tras la segunda etapa)

Puesto,nombre,costera de Alicante,Meta Volante1,Etapa1,Meta Volante2,Etapa2, total

1-Ericsson 4. 2,5+3,5+8+4+8 = 26 Puntos

2-Telefónica Azul. 4+2+4+2+7= 19 Puntos

3- Puma. 3+3+7+1+4 = 18 Puntos

4- Green Dragon. 2+4+5+3+2= 16 Puntos

5- Ericsson 3. 0,5+0,5+4+3,5+6 = 14,5 Puntos

6- Telefónica Negro. 3,5+2.5+1+1,5+ 5= 13,5 Puntos

7- Delta Lloyd. 1+1+2+0,5+3 = 7,5 Puntos

8- Team Russia.0,5+0,5+3+2,5+1= 7,5 Puntos

 
 



El Telefónica Azul ha ganado la tercera etapa de la Volvo Ocean Race , entre Cochin (India) y Singapur, en un final más propio de las regatas cortas que se disputan entre boyas frente a la costa que de una travesía oceánica de dos mil millas que ha durado 9 días, 4 horas, 51 minutos y 22 segundos. El barco capitaneado por Bouwe Bekking aventajó en la línea de meta al segundo clasificado, el Puma estadounidense, por sólo 16 minutos. A menos de dos minutos del Puma llegó el Ericsson 3 de Anders Lewander y 40 segundos después el Ericsson 4, de Torben Grael-, cerrando así una emocionante batalla entre los cuatro barcos que no se decidió hasta el último momento.

El estrecho de Malaca, que separa la península de Malasia de la isla de Sumatra (Indonesia), respondió a las expectativas creadas, en cuanto a campo de regatas desconocido, complicado e imprevisible. Tiene unos 800 kilómetros de largo y entre 50 y 180 kilómetros de ancho. No sólo es uno de los lugares del mundo con mayor tráfico de mercantes, sino que la flota de pesca de la zona tiene el lugar minado de redes y abundan los bancos de arena. Además, como suele ser habitual en aguas cerradas, las condiciones de viento son tan inestables y diferentes que, estando los veleros unos a la vista de otros, alguno de ellos conseguía avanzar empujado por una brisa errática mientras los otros seguían clavados en pozos de calma total. En algunas ocasiones los competidores incluso se vieron obligados a echar el ancla para no verse empujados hacia atrás por la intensa corriente propia de un estrecho.

Los tripulantes de los cuatro barcos inmersos en ese disputado final confesaron que el estrés vivido en las últimas singladuras había sido agotador, con todo el mundo en cubierta permanentemente, cambiando velas a cada pequeña variación de viento y viendo cómo una pequeña ventaja lograda con mucho esfuerzo se convertía en desventaja apenas unas horas después.

La batalla táctica y las dificultades para avanzar propiciaron situaciones insólitas en una competición de vuelta al mundo, como un babor-estribor entre el Ericsson 3 y el Telefónica Azul que el barco español protestó por entender que el sueco no había respetado su preferencia de paso, tal y como establece el Reglamento Internacional para Prevenir Abordajes, que, naturalmente, mantiene su vigencia en cualquier situación, incluidas las regatas. La protesta está ahora a expensas de lo que decida el comité de la regata, en una nueva similitud con lo que suele ocurrir en las pruebas costeras.

El Telefónica Negro, patroneado por Fernando Echávarri, tuvo también sus opciones, remontando en los últimos días hasta tener a la vista a los cuatro primeros, aunque finalmente entró en la quinta posición. Por detrás, Green Dragon Team Russia y Delta Lloyd . Los dos últimos con serias dificultades. El equipo ruso ha anunciado oficialmente que no puede continuar en la competición por falta de presupuesto para abordar las siguientes etapas. Y el Delta Lloyd, patroneado por Roberto Bermúdez de Castro, sufrió hace días una avería en el sistema hidráulico que permite mover la quilla como un péndulo para hacer de contrapeso y ha tenido que conformarse con navegar para llegar a puerto, sin disputar la etapa.

Ahora, la clasificación general está encabezada por Ericsson 4 (Suecia), con 35 puntos, seguido por Telefónica Azul (España) con 30,5; tercero Puma (EE.UU.), con 27,5; cuarto Ericsson 3 (Suecia), con 23,5; quinto Green Dragon (Irlanda-China), con 20,5; sexto Telefónica Negro (España), con 19,5; séptimo Team Russia (Rusia), con 10,5 y el último es Delta Lloyd (Holanda), con 8 puntos.
 

Suso Pérez