Cómo encontrar al amor de tu vida

Las personas elegimos estar al lado de otro para ser amados, cubrir nuestros deseos y necesidades y compartir nuestra vida. Pero muchas veces esperamos o demandamos de nuestra pareja cosas que no siempre se nos darán. ¿Cómo podemos amar a alguien tal cual es? ¿Existe el amor de la vida o la media naranja? En el siguiente artículo te lo revelamos.

La pareja ideal es aquella persona que mejor se adapta y adecua a nuestra personalidad, características psicológicas y modos de pensar, al mismo tiempo que nosotros nos adaptamos a los de ella. Con la pareja ideal es necesario compartir proyectos de vida, ideologías y ser capaces de superar tiempos de crisis. Para esto, no es necesario encontrar a una persona perfecta, sino que a alguien a quien amemos, con quien compartamos cosas en común y a quien podamos querer y respetar tal cual es, sin querer cambiar su modo de ser todo el tiempo.
De esta forma, encontraremos a esa persona en la medida en que no le exijamos que sea como nosotros queremos que sea, es decir, que se transforme en la pareja que nosotros tenemos idealizada en nuestra mente, como en un cuento de hadas. La vida no es como un cuento, no podemos pedirle al otro que colme todas nuestras necesidades.

Pero para lograr encontrar a alguien sin exigir que sea el hombre perfecto, primero debemos haber construido una identidad personal acorde a la realidad y no demasiado conflictiva. Esto, debido a que es difícil estar bien con los demás si no lo estamos con nosotros mismos. Debemos tener claro que para ser amados, primero debemos aprender a amarnos a nosotros mismos, con nuestros defectos y virtudes, sólo así podremos querer y aceptar al otro también con sus desperfectos. Así, cuanto mayor sea el conocimiento personal que tengamos de nosotros mismos, más cerca estaremos de encontrar en el otro lo que buscamos.






Es probable que cuando encuentres al amor de tu vida sientas algunas de estas cosas:

•Eres para esa persona algo único y especial, te valora como persona, tal cual eres y te quiere y te desea como pareja.

•Respeta y apoya tus proyectos personales, pues no espera que estés sólo para él, dejando de lado tus planes y tu vida. Se concentra y se percata en los cambios que haces y está presente apoyándote cuando tienes problemas, del mismo modo que lo estás tú cuando él lo necesita.

•Ambos comparten las mismas ideas respecto de cómo criar y educar a los hijos, considerando aspectos como la participación y responsabilidades que tendrá cada uno en ello, el momento vital en el cual tenerlos, el número, etc.

•Ambos disfrutan conversando y escuchándose el uno al otro, no necesitan de otras personas o eventos para pasarlo bien y disfrutar juntos.

•Frente a las dificultades, discusiones o diferencias, ambos muestran interés por resolver el problema y además, ambos están dispuestos y abiertos a cambiar cosas que al otro le molestan.

•Existe compatibilidad sexual, la sexualidad es gratificante para los dos y ambos tienen necesidades, deseos y exigencias similares en la cama.

•Ambos comparten valores éticos y morales similares, sintiéndose cada uno cómodo con las ideologías y creencias del otro.

•Las diferencias y aspectos personales del otro que no nos gustan, podemos tolerarlos y no son motivo para plantearnos el no estar con esa persona para toda la vida.


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