Re: la esquina "che va de bo"

El primer capitán del Valencia, Carlos Marchena, desmintió que los jugadores del Valencia hayan notificado a la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) los impagos del club.

Marchena aseguró que la información, publicada por el diario 'Levante-El Mercantil Valenciano', les ha cogido "por sorpresa" y aseguró que ni él ni ninguno de los otros tres capitanes --Albiol, Vicente y Villa-- se han puesto en contacto con la AFE.

Por ese motivo, el capitán realizó este desmentido y afirmó que se había producido contacto alguno con la AFE en una rueda de prensa imprevista, debido a que este martes era el día de descanso de la plantilla.

En este sentido, el central sevillano aseguró que no están "intranquilos" y que seguirán "con la misma dinámica". "Le damos la confianza al presidente y al club y estamos todos unidos", explicó Marchena.

El sevillano se remitió a la última reunión que la plantilla tuvo con el presidente Vicente Soriano, en la que éste dio la palabra "de que todo se iba a arreglar". Además, aseguró que la plantilla no ha pedido más explicaciones a Soriano. "Cuando damos confianza hay que darla hasta el final", señaló.

Por último, Marchena evitó hablar de utilizar algún tipo de medidas en el caso de que prosigan los impagos. "Si hablamos de hipótesis, la única que manejamos nosotros es la de que todo se va a arreglar", sentenció.

La eliminación de la Copa de la UEFA se une a la paralización de las obras del nuevo estadio, a los retrasos en los pagos a los jugadores y a los mediocres resultados que está logrando el conjunto de Unai Emery en las últimas jornada de Liga. Los valencianistas deberán centrarse a partir de ahora en lograr la clasificación para la Liga de Campeones la próxima temporada y solucionar lo antes posible los temas antideportivos que azotan al club, ya que en competiciones europeas han sufrido una nueva desilusión en una temporada que no está siendo la más brillante del conjunto ché precisamente.

Para una cita tan importante como la vuelta de los dieciseisavos de la UEFA se buscó hacer una burbuja a todos los problemas, pero finalmente los de Emery no pudieron doblegar a un Dinamo de Kiev que, pese a dar una buena imagen, no demostró ser superior al Valencia. Cada equipo fue el dueño de un parte del choque y finalmente, los de Semin se aprovecharon de los errores cometidos por la zaga local y los valencianistas no lograron concretar las muchas ocasiones de las que gozaron, ya sea por desacierto de los jugadores de ataque o por fortuna de los ucranianos.

Con todo esto, el Valencia salió buscando la posesión del balón, pero se dio cuenta de que el conjunto visitante no vino a España de turismo, sabía tocar el balón y eran dueños del mismo debido a que Maduro no ayudaba a Fernandes por dar a los chés el centro del campo. Esto, se podría haber evitado si el colegiado del encuentro, Damir Skomina, hubiese señalado un posible penalti a los tres minutos de partido sobre Villa, algo que habría dado muchas facilidades a los de Emery. Con la posible pena máxima olvidada, el Dinamo buscó el peligro con llegadas por la derecha y centros al área, lo que puso en problemas al centro de la zaga y a Del Horno, quien se aplicó con el paso de los minutos.

El Valencia tuvo claras ocasiones
A pesar de que el Valencia corría detrás del balón, se pudo ir con varios goles a su favor al descanso si hubiese tenido algo más de fortuna, ya que Silva no estuvo acertado para rematar a gol un pase desde la línea de fondo de Morientes, la zaga del Dinamo sacó de debajo de los palos un disparo de Fernandes tras la salida de un saque de esquina y Bogush se encontró el balón en un chut de Mata desde el punto de penalti. Precisamente después de la ocasión más clara del Valencia llegó el tanto visitante como consecuencia de la falta de contundencia de la defensa valencianista.

Kravets, que marcó en las dos ocasiones que tuvo, superó a Albiol y a Fernandes dentro del área y a pesar de salir algo desequilibrado del regate, pudo superar a César por bajo en el mano a mano. Primer mazazo para los locales que pasaron de un posible uno a cero a ver cómo debían remontar el choque si querían estar en los octavos de final de la UEFA. Tras el tanto llegaron los peores minutos del Valencia. Las imprecisiones eran constantes, no conseguían dar dos pases seguidos y los despejes caían siempre a los pies de los ucranianos, quienes no fueron capaces de irse al descanso con algún tanto más por fortuna para los españoles.

Los valencianistas reaccionaron tras el descanso
Cuando Emery ya estaba pensando en la charla que iba a dar a los suyos durante el descanso llegó el tanto de Marchena. El central aprovechó una jugada aislada para igualar las cosas y machacar a los ucranianos con un gol psicológico. Fernandes botó una falta desde la izquierda y el capitán local superó a sus marcadores para cabecear a gol el esférico y dar una pequeña alegría a una afción que está sufriendo demasiado en las últimas fechas. Con todo esto, el Valencia se iba por el túnel de vestuarios igual que los había dejado 45 minutos antes, con la eliminatoria igualada, pero con el matiz de que si acaba la cosa así se irían a los penaltis.

Esto lo quiso evitar Emery a toda costa, les animó a que buscaran el balón, tocaran en centro del campo y no se arrugaran ante la zaga visitante. Los jugadores se lo tomaron en serio y Fernandes se hizo con el centro del campo pese a la nula colaboración de Maduro, los puntas buscaron crear huecos, la zaga rara vez dudó y las bandas eran dos autopistas para buscar centros al área. Precisamente, con una jugada junto a la línea de cal llegó el tanto que metía al Valencia momentáneamente en octavos. Del Horno superó a dos rivales, el tercero le derribó junto al área y el mismo lateral remató la consecuente falta botada por Fernandes.

Todo eran sonrisas en Mestalla. Su equipo jugaba bien, tenían el balón, hacían rondos con los jugadores rivales y se creaban ocasiones que preveían un nuevo tanto ché. Esto se acabó de un plumazo cuando Albiol buscó su momento de gloria. El zaguero cogió el balón en la zona defensiva de su equipo, quiso emular a los grandes centrales europeos al sumarse al ataque tras dejar atrás a cuantos rivales se le cruzasen y cuando superó el centro del campo, perdió el balón dejando a su equipo con importantes huecos defensivos. Con un pase Kravets se plantó de nuevo ante César y no le tembló el pulso para superar al extremeño en el mano a mano.

La decepción era notable entre todos los valencianistas y después de varios intentos por marcar un tercer tanto, el Valencia y los valencianistas pusieron fin a su aventura europea por esta temporada, lo que se suma a todos los problemas que arrastra en las últimas fechas.

El presidente del Valencia, Vicente Soriano, explicará este miércoles por la tarde la actual situación financiera y económica de la entidad en la reunión del consejo de administración, con el fin de aportar luz a la crisis que vive la entidad y que le han reclamado tres de sus consejeros.

Soriano acudirá a la reunión con el reciente contrato firmado con Mediapro por la venta de los derechos televisivos, para los próximos cinco años, como máximo aval y argumento dentro de su plan de viabilidad para reflotar al club.

El presidente tratará de convencer a los consejeros más críticos con su gestión como son Antonio Olmedo, Benjamín Muñoz y Ana Julia Rosselló. Soriano tiene previsto explicarles las negociaciones que mantiene abiertas para lograr ingresos que alivien la delicada situación actual.

El Valencia acumula impagos a los jugadores, a la unión de empresas temporal (UTE) que construye el nuevo estadio y que ha paralizado las obras, además de otros acreedores como clubes de fútbol por el fichaje de jugadores.

Estos tres consejeros han demandado un repaso a la cuentas del club a fecha de hoy, ante la posibilidad de llegar a la Ley Concursal o verse involucrados en una acción de responsabilidad social, que medita un grupo de accionistas entre los que se encuentran ex consejeros y ex presidentes del Valencia.

Soriano esgrimirá, además del contrato con Mediapro, el acuerdo con la firma de ropa deportiva Kappa --que se hará oficial en junio-- y el patrocinio con Unibet, con el que se han abierto negociaciones para que sea el esponsor principal de la próxima campaña.

Sin embargo, la gran promesa de Soriano fue la venta de las parcelas de Mestalla, que hasta el momento no ha conseguido, y que ha pasado a un segundo plano ante la falta de compradores. Esta venta, por un valor de 300 millones de euros, está incluida en el presupuesto de la actual temporada que arrojaría un superávit de 140 millones de euros.

Este será el principal punto que le recriminarán los tres consejeros críticos, ya que la ausencia de este ingreso trastoca todo el proyecto económico de la entidad y hace nulo el presupuesto.

Unai Emery ha deseado que el equipo, con la derrota ante el Numancia, haya tocado fondo en lo deportivo y que a partir de ahora empieza a remontar en cuanto a resultados.

Emery, que ha asegurado que el único responsable en materia deportiva es él, ha señalado que sólo queda "trabajar y trabajar" para sacar el equipo adelante.

En cuanto al encuentro, Emery ha apuntado que su equipo ha controlado bien hasta el 0-1 pero con el empate el Numancia se ha venido arriba.

Ha señalado que Aranda ha controlado sin presión en el área, pero su defensa, según le ha comentado, no ha visto la trayectoria del balón debido al sol que daba de cara.

Emery ha comentado que el equipo salió bien en la segunda parte pero el 2-1 complicó las cosas.

Raúl Albiol aseguró que su intención es quedarse en el Valencia "muchos años", ya que tiene contrato y espera cumplirlo, en referencia a los problemas económicos del club ché que podrían obligarle a desprenderse de varios jugadores para conseguir dinero el róximo verano.

Albiol se mostró "encantado" de jugar en el Valencia. "Es el equipo de mi ciudad y ojalá pudiese quedarme aquí siempre", añadió. Además, aún no sabe qué hará el club con él, y en este sentido concluyó que el equipo, aunque tenga que desprenderse de varios jugadores, "seguro que habrá buen equipo para luchar por cosas importantes".

"Hasta el 30 de junio estamos todos defendiendo la camiseta del Valencia"

Aunque pocos jugadores del Valencia tienen asegurada la continuidad en la próxima temporada, Albiol quita importancia a este aspecto. "Si uno se tiene que ir, se irá, pero hasta el 30 de junio estamos todos defendiendo la camiseta del Valencia", añadió.

Además, se refirió al fichaje del central del Castellón Dealbert, que ya está fichado para la próxima temporada. "Nunca he discutido los fichajes del club y siempre hemos recibido a los nuevos jugadores con los brazos abiertos", comentó.

"Toda la plantilla es culpable, del primero al último"

Sobre la charla del vicepresidente deportivo del club, Fernando Gómez Colomer, a la plantilla, Albiol cree que "hizo lo que tenía que hacer" y no ve ningún problema al respecto, y asume que toda la plantilla "es culpable, del primero al último". Además, añadió que los jugadores sólo pueden "saltar al campo, trabajar, correr y ganar el partido".

El central valenciano es consciente de que el sábado pueden encontrarse a una afición desencantada. "Sabemos que el ambiente no va a ser el mejor, pero tenemos que estar preparados para encontrarnos cualquier ambiente y sólo podemos pensar en el partido", explicó.

Recuperar la confianza perdida
Raúl Albiol cree que el partido del sábado ante el Recreativo de Huelva es "clave para que el equipo coja la confianza que ha perdido", y aboga porque la plantilla "se olvide de todas las cosas malas".

Por último, el de Villamarchante ve al entrenador del Valencia, Unai Emery, "tranquilo, buscando soluciones para cambiar las cosas, con muchas ganas para trabajar y de volver a la dinámica de buenos resultados y de buen juego".