FRANCISCO ORTIZ INVENTOR MALAGUEÑO

Un invento por el que Lampard se tira de los pelos
El malagueño Francisco Ortiz Delgado presentó hace ya siete años a la FIFA, sin éxito, un estudio que hubiera validado el ´gol fantasma´ del medio inglés ante Alemania. El secreto está en crear una pendiente hacia abajo de apenas 10 grados a partir de la línea de gol y en dirección a las redes




RAFAEL M. GUERRA. MÁLAGA Quizá ayer los feroces tabloides ingleses no hubieran despotricado ni contra Fabio Capello, del que pidieron su cabeza en bandeja de plata, ni contra sus muchachos. Quizá hoy, el espigado Frank Lampard hubiera sido coronado como el líder de la reacción inglesa ante el ciclón alemán. Quizá hoy el mundo entero no se estaría preguntando a qué se debe esa involución declarada y aceptada por la Federación Internacional de Fútbol (FIFA) al desechar la ayuda de pequeños inventos y de las nuevas tecnologías.

Un malagueño, Francisco Ortiz Delgado, podría haber variado el rumbo del encuentro de octavos de final del domingo en el Mundial de Sudáfrica entre Alemania e Inglaterra, con triunfo para los teutones (4-1) tras un ´gol fantasma´ tan claro como evitable antes del descanso y que hubiera supuesto el empate a dos.

Paco Ortiz, funcionario jubilado, amigo de los inventos futbolísticos, propuso hace justo siete años una leve modificación en el terreno de juego que hubiera evitado la situación caótica vivida en el estadio Fee State de Bloemfontain en la tarde dominical. Pero la FIFA, como en otros tantos casos, miró para otro lado. Como el portero alemán, Manuel Neuer, que, raudo tras ver cómo el colegiado uruguayo Jorge Larrionda ordenaba continuar el juego, atrapó con pillería el balón y continuó el partido. «Estaba seguro de que había rebasado la línea, pero creo que mi reacción de sacar rápidamente confundió al árbitro», admitió ayer el propio cancerbero en un estupendo ejemplo de fair play. Y aquí paz y después gloria.

La propuesta presentada por Ortiz Delgado es tan sencilla que asombra la negativa del organismo que vela por los intereses del fútbol. No habría que parar el juego para consultar ningún vídeo ni reclamar la atención del cuarto árbitro. La Física es la clave de esta simple operación. Y es que bastaría con inclinar apenas diez grados la zona que comprende la línea de puerta hacia las redes de la portería para que el balón no engañara ni a los árbitros y ni a los aficionados.

«La portería debe tener un plano inclinado hacia abajo detrás de la raya para evitar los ´goles fantasmas´, como sucedió en el partido entre Alemania e Inglaterra», comentó ayer el malagueño, que vivió un día de lo más ajetreado. Telecinco, la propietaria de los derechos audiovisuales del Mundial para España, Radio Marca, la SER o Canal Sur se interesaron por su invento tras el día de autos.

Koke Contreras lo probó

El prototipo se construyó y probó con éxito hace ya más de un lustro en varias pruebas efectuadas en La Rosaleda. Y el inventó funcionó a las mil maravillas. Gracias a esa leve y casi imperceptible inclinación del suelo, el balón, aunque lleve el efecto contrario, se quedará dentro de la portería si es que ha botado totalmente por detrás de la línea. El ex cancerbero madrileño del Málaga, Koke Contreras, –mundialista en Corea-Japón 2002– fue el maestro de ceremonias. «Los jardineros inclinaron el terreno 10 grados y la prueba fue perfecta», insistió.

Así, el disparo de Lampard desde la frontal del área, que atravesó claramente la línea de meta pero no fue captado por el trío arbitral, hubiera regresado al lugar que debía, junto a las mallas. El partido, con 2-2 y más de 50 minutos por delante, podría haber dado un brusco giro.

«Si hubiera sido famoso, esto ya hubiera ido para adelante. Lo presenté hace ya siete años. La FIFA contestó que lo pasaban al departamento técnico y a día de hoy siguen sin decidirse. Los que manejan el fútbol no escuchan a la gente de a pie», criticó.
No es éste el único invento en aras de mejorar el deporte rey de este jubilado de 62 años, residente en Rincón de la Victoria, y gran aficionado a la relojería. También hace ya más de un lustro este malagueño ideó un práctico spray para ubicar con exactitud las barreras a la hora de lanzar las faltas y evitar así que se movieran.

La peculiaridad del spray es que desaparece en apenas tres minutos, por lo que no deja marca y el césped recupera pronto su tono habitual. «También lo presenté a la FIFA y, ¿sabes lo que ha pasado? Pues que ha comenzado a utilizarse en Argentina, México y Brasil. El problema es que la patente sólo es para Europa, por lo que allí lo comercializan sin mi permiso y yo no gano nada».

Su última aportación data de 2005 y consiste en un balón con ejes huecos que presenta menos resistencia al aire y que, por lo tanto, recorre un mayor trayecto. El balón es atravesado internamente por cuatro tubos que posibilitan que el esférico apenas gire sobre su eje. «Tiene más precisión, mayor bote y se dirige mejor».