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El club blanco está dispuesto a invertir los más de 80 millones que tenía preparados por el crack luso.Los nervios se han instalado en la casa blanca tras el inminente fiasco de la operación Cristiano Ronaldo. Parece que el luso empieza a no tener nada claro su fichaje y el Manchester United se mantiene firme, por lo que el traspaso del siglo comienza a abortarse. Tan mal está el asunto que el Real Madrid ha comenzado a activar operaciones que tenía en el olvido para reforzar su plantilla e invertir los más de 80 millones de euros que tenía preparados por Cristiano. Los objetivos de Calderón pasan por españolizar el Madrid con fichajes como Villa o Xabi Alonso y contentar a Schuster con la llegada de Van der Vaart y, seguramente, un central veterano.
Ramón Calderón estaba obsesionado con Cristiano Ronaldo hasta el punto que paralizó toda la planificación deportiva del primer equipo. La llegada del luso implicaba la salida de algún jugador importante como Robinho o Baptista para hacer caja y la llegada de algún otro fichaje de poco precio para completar la plantilla.
Todo parecía ir viento en popa, ya que el Real Madrid siempre contó con la complacencia de Cristiano Ronaldo, pero Calderón no contaba con la defensa numantina que está haciendo el Manchester United por su futbolista estrella. La operación se ha estancado más de la cuenta y Schuster ha reclamado ya a la dirección deportiva que comience a trabajar en otra línea de incorporaciones porque ya no puede esperarse más.
El objetivo prioritario, si lo de Cristiano no se desencalla esta misma semana, es Villa. El delantero valencianista está considerado como el delantero idóneo para competir con Van Nistelrooy. El holandés ya no está para jugar cada semana y Villa sería un titular de lujo. El principal problema es que el Valencia, tras la llegada de Villalonga, no quiere venderle e, incluso, le ha renovado. Su precio podría llegar ahora a los 40 millones de euros.
Otra de las piezas que llegará al Madrid casi con toda seguridad es el holandés Van der Vaart. El jugador puede salir por unos doce millones de euros y Schuster le considera como un futbolista esencial para su esquema ofensivo. Muchos equipos le quiere, aunque podría ya haber algún acuerdo para que acabe en el Santiago Bernabéu.
Por último está la opción de Xabi Alonso, un futbolista que siempre ha encajado en la dirección deportiva blanca, pero que sólo llegaría si se consigue dar salida a Diarra. Le descartaron a principios de verano, pero el Liverpool necesita venderle y su precio ha bajado por lo que se considera como una buena operación de mercado.
Schuster sí que ha pedido de forma explícita el fichaje de un central veterano. El Real Madrid fichó a Garay, pero lo ha cedido por una temporada al Racing. El próximo año acaba contrato Cannavaro y le buscan un buen recambio con tiempo. El preferido es el portugués Carvalho, del Chelsea.