26.9.2018 Rossi: “¿Dónde está la moto del año que viene?
En su afán por lograr una reacción por parte de Yamaha, Valentino Rossi asegura que todavía no tiene información alguna sobre el prototipo de 2019.
Cuando la marca de los diapasones optó por renovar al italiano y abrió las puertas para que Jorge Lorenzo fichara por Ducati, la etiqueta impulsada para identificar aquel proyecto fue #elegimoshacerhistoria.
Pues bien, Yamaha hizo historia el pasado fin de semana en Alcañiz, aunque con toda probabilidad no en los términos que se esperaba: el Gran Premio de Aragón, en el que Rossi terminó el octavo y Maverick Viñales el décimo, supuso la 23ª cita consecutiva sin lograr una victoria para el constructor japonés, esto es, su peor racha de siempre.
Los
problemas de falta de tracción en la M1 que martirizan al equipo desde hace más de un año parecen haber paralizado también la mirada a largo plazo del departamento técnico del fabricante de Iwata.
El sábado pasado, en Motorland, al margen de subrayar que una de las mayores frustraciones de la escudería radica en no saber encontrar el causante de esos problemas, Rossi también lamentó la falta de comunicación existente entre el área de MotoGP de Yamaha, y el reparto técnico, en Japón. “No sé nada del proyecto”, dijo antes de reclamar, ya el domingo, una
revolución parecida a la que se llevó a cabo en 2003, cuando se le fichó a él y a un nuevo destacamento técnico encabezado por Masao Furusawa.
Probablemente, lo más preocupante sea la desorientación de la división técnica, que no solo no consigue subsanar los déficits provocados por el motor y la electrónica de la M1, sino que además ya va tarde con vistas al curso que viene.
A estas alturas de la temporada, la mayoría de equipos ya tienen más o menos lista la base de la
moto que pondrán en pista en 2019. Eso, según reconoce Rossi, no ocurre en Yamaha.
“Lo que es preocupante es que, hasta hace algún tiempo, en Brno ya probábamos la moto del año siguiente. Pero desde hace un par de años, no lo hacemos. ¿Dónde está la moto de 2019”, pregunta
Il Dottore de forma retórica.
“Lo que sí nos dejaron probar fue la primera versión del nuevo motor, pero espero que no sea la definitiva porque es muy similar al que usamos. Y lo que es evidente es que hay que mejorarlo”, remacha
Rossi.