Rossi le gana la partida a Stoner en la mejor carrera del año

Una carrera que vale por todo un año. La prueba de Laguna Seca ofreció todo el espectáculo que había faltado durante el Mundial. Por un día se habló poco de neumáticos, control de tracción, potencia del motor y otros aspectos técnicos que dejan frío al aficionado.

En Estados Unidos todos disfrutaron con los dos mejores pilotos del mundo, que hicieron una demostración quizás como homenaje a los mitos vivientes que han visto estos días. Fue una carrera dignas de los duelos Rainey-Schwantz, del innovador pilotaje de Kenny Roberts, de los títulos con distintas marcas de Eddie Lawson, de las proezas de Freddie Spencer cambiando de moto y ganando en cuestión de horas.

La madre de todas las batallas
Fueron sólo 24 vueltas de duelo, pero fue la madre de todas las batallas. Sólo podía haber un vencedor y ese fue Valentino, que hizo la carrera que mejor le fue. Casey salió a todo trapo, como es costumbre. Parecía que íbamos a ver lo mismo que en las últimas pruebas: escapada en solitario y paseo militar del australiano. Pero Rossi le pasó en el sitio más mítico para hacerlo: el Sacacorchos. Ya le dejaba claro que ésta no iba a ser tan fácil. La vuelta 3 fue espectacular. De lo mejor que se ha visto en MotoGP en años. El de Ducati le pasó en la primera curva; el de Yamaha se lo devolvió en la curva 6 y fueron paralelos toda la recta Rahal. Hicieron toda la subida y el italiano se subió por el piano y pisó la tierra en pleno Sacacorchos para mantener la posición. Esto no frenó al de Southport que se arrimó a tope al final de la última curva para volver a superarlo a final de recta. La historia se repitió y el de Tavullia volvió a ponerse primero en la curva 6. Se inició entonces una lucha sin tregua hasta a falta de nueve vueltas. Stoner, entonces, volvió a pegarse al máximo en la última curva para pasarle a final de recta, pero se pegó demasiado y se tuvo que apartar. No fue una simple colada. Pisó la arena y luego la besó. El campeón estaba vencido. Pese a todo, Casey tuvo suerte y pudo poner su moto en pie para acabar segundo.

Por un día es el perdedor, pero promete que esto no está acabado. El Mundial es largo. "Cometí un error, pero me lo he pasado muy bien", admitió el aussie. Por delante sólo un fuera de serie, Rossi. El italiano emuló a su compatriota Luca Cadalora, que había sido el único europeo en vencer en Laguna Seca. Vale estaba emocionado. Para él, este triunfo sabe casi tan bien como un título. Ha ganado siete, pero su celebración fue apoteósica. No era para menos. En plena vuelta de honor se paró en el Sacacorchos y le plantó un beso de película. "Ahora me puedo ir de vacaciones relajado", dijo.

La caída de Lorenzo
El carrerón empañó todo. Empezando por Jorge Lorenzo. El balear no duró ni una vuelta. Partía cuarto, pero en la salida perdió dos posiciones. La curva 1 es nefasta para él. Él mismo reconoció todo el fin de semana que se le atragantaba y que la hacía 10 kilómetros por hora más lento que el resto. En la salida no fue tan lento, pero dio igual. El mallorquín quiso enmendar tal borrón y pasó a Toseland en la curva 5, pero se fue al suelo al siguiente giro. El resultado fue fractura del tercer y el quinto metatarsiano del pie izquierdo. El doctor Macchiagodena, el médico del Mundial, afirmó que estará en disposición de salir en Brno el 17 de agosto.

Ausente Pedrosa, el mejor españo fue Toni Elías, que realizó al fin una carrera brillante premiada con el séptimo puesto final.