El gasto previsto para la televisión autonómica TVG en el año 2010 es similar al del presente ejercicio, en que tenía 126,6 millones de euros previstos en los Presupostos de la Xunta de Galicia
Las emisiones de Televisión de Galicia (TVG) le costarán el próximo año 47 euros a cada ciudadano gallego, según se desprende de la información aportada al Parlamento por el director general de la compañía, Alfonso Sánchez Izquierdo, quien cifró en 127 millones de euros (21.131 millones de las antiguas pesetas) el presupuesto de la cadena para el próximo año.
A este coste todavía habría que añadir el presupuesto de la Radio Galega (RG), que este año ascendió a 12,2 millones de euros, así como el de la compañía propiamente dicha, la CRTVG, que consumió otros 15,4 millones de euros más.
El gasto previsto para TVG en el año 2010 es similar al del presente ejercicio, en que tenía 126,6 millones de euros previstos en los Presupostos de la Xunta. Sánchez Izquierdo explicó ayer en una comparecencia parlamentaria que el modelo estratégico del ente autonómico camina hacia el «colapso», si bien expuso que la compañía redujo este semestre sus costes operativos en 10,5 millones.
El director general explicó en la comisión parlamentaria de control de la CRTVG que la reducción de los costes operativos es producto del «axuste fulminante» que está sufriendo la compañía, principalmente por tres motivos. Por un lado está la caída de la audiencia, a lo que hay que añadir la merma de los ingresos por publicidad, que Sánchez Izquierdo cifró en 1,6 millones de euros, así como la situación «notoriamente deficitaria» que se habría heredado del anterior equipo directivo.
Petición de tres millones
Ante esta situación, Sánchez Izquierdo anunció su determinación de pedirle a la Xunta una inyección adicional de tres millones de euros a TVG, hasta alcanzar los 127 millones en el 2012, aportación que iría destinada a compensar la fuerte caída de los ingresos publicitarios.
Los planes expuestos por el director general de la CRTVG fueron criticados abiertamente por los grupos de la oposición, el PSOE y el BNG, que coincidieron en atacar lo que se está convirtiendo en el talón de Aquiles de la gestión de Sánchez Izquierdo: la caída ininterrumpida de la audiencia de TVG. De hecho, el socialista José Luis Méndez Romeu aludió con especial énfasis a la «caída libre de telespectadores» que llevan a la televisión gallega a pasar de la segunda a la cuarta posición de las cadenas más vistas.
(La Voz de Galicia, 30/09/09)