Las cuentas públicas previstas son compatibles con un déficit del 5% del PIB

expansion.Salgado: "Necesitamos estos presupuestos para compensar el impacto de la crisis.
Elena Salgado, vicepresidenta segunda del Gobierno y responsable de la cartera de Economía, ha defendido esta mañana el anteproyecto de la Ley de Presupuestos Generales del Estado, el cual se debate hoy en el Congreso de los Diputados, ya que permitirá compensar la contracción de la economía española fruto del impacto de la crisis financiera global.La ministra ha justificado esta mañana la necesidad de aumentar la presión fiscal como parte de las medidas incluidas en el anteproyecto de Ley de Presupuestos Generales para 2010, que supondrán un aumento de los tipos de gravamen. Salgado ha recalcado que el Gobierno ha bajado los impuestos cuando ha sido posible, pero ahora pide a los ciudadanos un esfuerzo "moderado y adicional" para financiar las políticas de lucha contra la crisis.

"La política de gastos e ingresos prevista en los PGE es compatible con un déficit del 5% del PIB", y nos permitirá cumplir con el pacto de estabilidad y crecimiento, mediante una reducción de 7.500 millones en materia de gasto y un aumento de 6.500 millones de euros mediante el moderado aumento tributario.

Nuestro nivel de endeudamiento seguirá estando por debajo de la mayoría de países de nuestro entorno y nos permitirá llegar la consolidación fiscal. "Es un moderado esfuerzo adicional a los contribuyentes que ayudarán a mitigar el impacto de la crisis". Asimismo, los PGE serán el colchón que permitirán consolidar la economía a lo largo de 2010.

"Hace un año dijimos que había una tendencia a la baja de nuestras predicciones iniciales de creimiento y estimamos que la crisis tocaría fondo a finales de 2009, y la realidad ha resultado ser mucho más dura de lo que nadie fue capaz de prever", ha señalado esta mañana Salgado en el debate sobre los PGE. "En 2008 se produjo un fuerte deterioro económico internacional que hizo añicos las previsiones de los gobiernos de todos los países. Ahora, la incertidumbre existe, pero se ha moderado notablemente, lo que mejora ahora las previsiones".

Mejoras, pero no suficientes
Así, la ministra ha subrayado que desde abril se observan signos de mejora en el sistema financiero, como son la reducción de las primas de riesgo en el mercado interbancario, más financiación, mejores expectativas mundiales y previsiones globales. No obstante, a juicio del Gobierno, el repunte no será suficiente para evitar que el PIB se reduzca y afecte, sobre todo, a las economías avanzadas. "Gracias a las políticas públicas, se ha evitado el colapso del sistema financiero y un estímulo del sistema fiscal sin precedentes. Es conveniente mantener la prudencia, porque la reactivación será lenta y tardará en reflejarse en el crecimiento del empleo neto".

Aunque, según la ministra, la economía española presenta un crecimiento similar a la de otros países de nuestro entorno, los indicadores han empezado a ser más alentadores y hay una desaceleración significativa respecto del primer trimestre del año, cuando la crisis alcanzó en España una mayor intensidad. Desde entonces hay indicadores que apuntan en la misma dirección de esperanza, como son la mejora de Alemania y Francia, y la necesidad de financiación de la economía española se ha reducido a casi la mitad.

A ello se une la corrección del desequilibrio exterior y del sector exportador, y también continúa la bajada del euribor, lo que constituye un gran alivio para las familias endeudadas. "Se aprecia una progresiva normalización de los mercados de deuda pública y nuestro diferencial con Alemania se ha ido reduciendo paulatinamente desde febrero".

Tasas positivas y negativas
La ministra ha explicado que las tasas intertrimestrales volverán a ser positivas en el primer trimestre de 2010 pero la tasa internanual será todavía ligeramente negativa, que estimamos en el 0,3%, "comportamiento moderadamente contractivo, compensado por la mejora de la demanda externa". No obstante, la mayor preocupación es el desempleo, un componente excesivamente volátil en el ciclo económico, que sufre en las recesiones ya que se destruye muy rápidamente y el coste del ajuste recae de manera desproporcionada en el empleo temporal.

No obstante, ha recordado, "la OCDE ha destacado que en España ya se ha producido la mayor parte del ajuste del empleo, y en otros países como Francia o Alemania se producirá con más retraso (...) En 2010 continuará la caída del empleo, pero de manera menos intensa, a una tasa del -1,7% internanual".

"El regreso a una agenda de crecimiento sostenido no va a ser inmediato, pero tenemos motivos para confiar en la recuperación de nuestra economía. La corrección de las debilidades estructurales de nuestra economía requiere tiempo, y mientras surten efecto las medidas encaminadas a crear una protección sostenible, el Gobierno tiene que poner en emarcha medidas para reducir el impacto de la crisis en la renta disponible de los hogares españoles", ha señalado Salgado.

El proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado para 2010 salvará hoy holgadamente el escollo de las enmiendas a la totalidad presentadas en el Registro del Congreso por PP, CiU, ERC-IU-ICV, BNG y UpyD. Todas ellas se debatirán y votarán en el Pleno de la Cámara Baja. El pasado viernes, media hora antes de que terminara el plazo para presentación de enmiendas de totalidad, el portavoz socialista, José Antonio Alonso, anunció el acuerdo con el PNV y Coalición para que ninguna de esas enmiendas salgan adelante.

El líder del principal grupo de la oposición, Mariano Rajoy, dará la réplica esta tarde a Salgado a partir de las 16:00, en la que tiene previsto, además, dar "alguna noticia" en el marco de los presupuestos, y volverá a insistir en la necesidad de rebajar los impuestos y reducir el gasto público.