Fernando Alonso confirmó en Jerez las buenas perspectivas para 2009. El piloto de Renault dominó de principio a fin la primera de las dos jornadas de entrenamiento que tiene en el circuito andaluz y sólo al final fue superado por Timo Glock y Felipe Massa, que realizaron un último sprint para mejorar sus registros.
Alonso se empleó a fondo desde las 9 de la mañana, hora en que se dio el banderazo de salida a la jornada, y completó nada menos que 152 vueltas (fue el piloto que más rodó) sin problemas. Quedó claro, con ello, que el R29 es rápido y fiable y tendrá mucho que decir en la temporada que empezará el 29 de marzo en Australia.
Las lluvias caídas en las últimas horas habían dejado la pista húmeda, pero las nubes fueron cediendo terreno a un tímido sol que secó el asfalto definitivamente y permitió a los pilotos mejorar sus registros.
Una progresión espectacularLa progresión de Alonso fue espectacular. Empezó con tiempos de 1:23, bajó un segundito, luego otro y, finalmente, estableció un ritmo de 1:20 bajos que sólo Massa pudo seguir. Fernando trabajó en tandas medias-largas, de entre 12 y 15 vueltas, a los mandos de un R29 sin KERS.
Lo más llamativo es, una vez más, la abismal diferencia entre los tiempos de Alonso y los de Nelson Piquet. El R29 parece un coche distinto en manos de los dos: con el español mete miedo y con el brasileño está siempre en la cola. También quedó claro que al asturiano no le preocupan los tiempos en estos momentos: cuando Glock y Massa fueron a por todas en los cinco últimos minutos él siguió a lo suyo. Ni siquiera hizo un simulacro de vuelta de calificación. Y aun así acabó a menos de medio segundo de Timo, el único que bajó de 1:20, y a milésimas de Felipe.
Salida de pista de MassaEl piloto brasileño, que el lunes no pudo trabajar por culpa de la lluvia, se mostró muy activo. Como Alonso, se decantó por las tandas largas y marcó buenos tiempos, aunque su ritmo medio fue casi siempre una décima más lento que el de Alonso. Fueron los dos grandes protagonistas del día, aunque Massa pagó su ansia con una salida de pista matinal.
Los que no parecen verlo claro son los hombres de McLaren. Heikki Kovalainen estuvo anclado en la última plaza durante la mañana, realizando pruebas de neumáticos, y por la tarde camufló sus tiempos montando un alerón trasero de 2008. Con él consiguió más carga aerodinámica y se aupó al cuarto puesto final, pero las sensaciones no parecen buenas. Veremos qué pasa con la llegada de Lewis Hamilton.
Fue un día prácticamente sin incidencias, salvo una breve parada del BMW de Kubica, avería que el equipo alemán solucionó inmediatamente./center]