Lorenzo, el más listo bajo la lluvia de Le Mans, recupera el liderato del Mundia

Jorge Lorenzo se llevó una trabajada victoria en el Gran Premio de Francia de MotoGP en Le Mans tras una carrera marcada por dos tiempos -con lluvia y en seco- y en la que Dani Pedrosa 'arañó' una tercera plaza 'in extremis' en la última vuelta en detrimento de Andrea Dovizioso y por detrás de Marco Melandri, que acabó segundo. Todo un 'milagro' el del italiano, teniendo en cuenta que en enero estaba en el 'paro'.

La prueba estuvo condicionada por el cambio de motos, pues la mayoría de pilotos había optado por neumáticos de agua una vez declarada la carrera sobre mojado, lo que permite entrar en los boxes y salir con otra máquina y gomas distintas.

Lo cierto es que Lorenzo, que con esta victoria recupera el liderato del Mundial, fue el más fuerte y 'listo' sobre el asfalto galo. Estuvo magistral porque salió a un ritmo superior a sus rivales, del tal forma que cuando se subió a su segunda Yamaha -fue el último en cambiar- el margen era suficiente como para volver a la pista de nuevo al frente de la carrera.

Un mal día para Rossi
No le ocurrió lo mismo a su compañero de equipo, Valentino Rossi, quien tuvo una carrera aciaga, quizás la peor vista nunca, en la que acabó decimosexto tras pasar hasta cuatro veces por el box de su equipo, una de ellas como consecuencia de la sanción impuesta al campeón italiano por haber superado la velocidad máxima permitida en esa zona.

Por su parte, Pedrosa fue otro de los que se equivocó de inicio y se precipitó a la hora de entrar en boxes. Al igual que Rossi, se mostró muy alocado y agresivo, pero el español logró fue más astuto y logró serenarse para recuperar posiciones y recortar siete segundos en ocho vueltas a su compañero de equipo, el italiano Andrea Dovizioso, y acabar superándole en la última curva.