MotoGP 2018 – Píldoras Tailandia: Guantazo al título, héroe silencioso y una caída feliz
El Gran Premio de Tailandia ha dado para muchas cosas, y estas son algunas de ellas.
El
Gran Premio de Tailandia, décimo quinta cita de la temporada 2018, dejó tres grandes carreras en el Chang International Circuit de Buriram.
Fabio Di Giannantonio ganó a Lorenzo Dalla Porta y Dennis Foggia en el triplete italiano de
Moto3. Pecco Bagnaia se impuso a Luca Marini y Miguel Oliveira en
Moto2. Por último, en
MotoGP fue Marc Márquez el que se llevó la victoria ante Andrea Dovizioso y Maverick Viñales.
Durante todo el fin de semana os hemos contado lo sucedido en las diferentes sesiones, así como las impresiones de los protagonistas. Hoy toca hacer un análisis más detallado en forma de
píldoras. Son diez pequeñas dosis, con la velocidad como principio activo, la gasolina como excipiente y sin efectos secundarios descritos. Posología al gusto, aunque se recomienda tomar todas de golpe.
PÍLDORAS MOTO3
Candidato silencioso La última vuelta de
Fabio Di Giannantonio en Buriram fue sencillamente perfecta. Mientras todos miraban a los dos contendientes al título, el joven piloto italiano era consciente de que los problemas físicos de su compañero le daban una ocasión de oro para recortar puntos en la general e inmiscuirse en lo que todos veían como una batalla a dos. Así lo hizo: se llevó su segunda victoria en el Mundial de forma magistral, y a falta de cuatro carreras para el final conserva totalmente intactas sus opciones de ser campeón del mundo de Moto3.
Llega el siglo XXI Di Giannantonio se imponía a su compatriota
Lorenzo Dalla Porta, precisamente los dos últimos pilotos que han estrenado su palmarés mundialista (‘Diggia’ lo hizo en Brno y Dalla Porta en Misano). Tras ellos, el rookie
Dennis Foggia aprovechaba el caos que se creaba delante de él para pescar en río revuelto y auparse a la tercera posición del cajón, adelantándose a sus rivales Jaume Masiá y Alonso López, que ya se han quedado a las puertas. Nacido el 7 de enero de 2001, Foggia se convierte en el primer piloto nacido en el siglo XXI en subir a un cajón mundialista. No será el último.
Guantazo al título Cuando parecían acabarse los problemas para
Jorge Martín, un masaje en Tailandia le tocaba un nervio de la mano izquierda que le impedía cerrarla correctamente, comprometiendo seriamente sus opciones en Buriram. Pensó que no podría correr, pero su padre Ángel se acordó de Noboru Ueda y se inventaron una solución en el guante que le permitió mantenerse en el grupo de cabeza. Llegó séptimo a la última curva, lo que le hubiese permitido salvar el liderato por los pelos ante
Marco Bezzecchi, que iba tercero. Pero
Enea Bastianini entró muy pasado y derribó a su compatriota, haciendo ganar tres posiciones a Martín (Jakub Kornfeil se fue largo para esquivarles), que de esta forma da un guantazo al título de Moto3 2018.
PÍLDORAS MOTO2 Trabajo oculto Por primera vez en mucho tiempo, su principal rival por el título se había mostrado muy sólido durante todo el fin de semana en lugar de encomendarse a su tradicional remontada dominical. Lejos de sentirse presionado al verse detrás en los libres –e incluso en clasificación-,
Pecco Bagnaia se concentró en lo que podía controlar: trabajar en su ritmo. En carrera clavó las dos fases de la misma: aguantó los envites de los dos pilotos de KTM y en cuanto pudo sacó a pasear su ritmo para lograr una nueva victoria y dar otro paso más hacia el título mundial de Moto2.
Perfecto escudero Un paso que se convirtió en dos gracias a su compañero
Luca Marini. El joven piloto italiano realizó una carrera de menos a más, y en los últimos compases de la carrera comenzó a remontar hasta llegar a los pilotos de KTM, lo que le daba una oportunidad inmejorable de colarse en el podio y, si conseguía superar a los dos, echar un cable a Bagnaia. Al podio accedió sin problemas y en la última vuelta aprovechó un error de Miguel Oliveira para rebasarle, rubricar el doblete del Sky Racing Team VR46 y restarle cuatro puntos de oro.
MotoGP 2018 – Píldoras Tailandia: Guantazo al título, héroe silencioso y una caída feliz
La historia se resiste Miguel Oliveira cambió el plan. El objetivo no era otro que conseguir una buena posición en parrilla para no tener que fiarse a una gran salida para estar con el grupo delantero. Lo consiguió, metiéndose en segunda fila por delante de Bagnaia. En carrera luchó con él, pero en esta ocasión fue la segunda mitad de carrera la que decantó la balanza en su contra. Con
Brad Binder a su espalda parecía tener la segunda posición asegurada, pero apareció Marini para superarles a los dos y relegarle al tercer puesto del cajón, lo que vuelve a alejar el que sería el primer e histórico título portugués, que parece que se resiste.
PÍLDORAS MOTOGP Made in Japan Ser campeón en Japón. Es el deseo de Honda y
Marc Márquez está decidido a cumplirlo. Siempre mola lucirse delante de los jefes, y le encanta lucirse. Para depender de sí mismo en Motegi, la única opción era ganar a Andrea Dovizioso en Tailandia. Sabía, también, que seguramente eso pasaría por tener que resolver en su favor un mano a mano ante una Ducati en la última vuelta, algo que desde la pasada temporada no había logrado. Para ello puso en marcha un plan claro: llegar primero a la última curva. Y bueno, el resto es historia: séptima victoria del año y opción de otro título ‘made in Japan’.
MotoGP 2018 – Píldoras Tailandia: Guantazo al título, héroe silencioso y una caída feliz
Todo al ápice Esta vez, al siempre fino de
Andrea Dovizioso le tocó hacer el papel del piloto arriesgado. Lo había intentado todo ante un Márquez que se mostraba fuerte pero no tan superior como en Aragón, lo que dejaba una última puerta abierta a la victoria. Sin nada que perder, el de Forlí lanzó su Desmosedici en la curva final y se lo jugó todo al ápice al más puro estilo Márquez, que se puso el traje de la finura y le devolvió la moneda de Austria, Japón y Qatar. Una apuesta casi desesperada que no suele dar sus frutos, pero que el instinto ganador obliga a intentar siempre en la última curva.
Diapasones en tierra Tercero y cuarto,
Maverick Viñales y Valentino Rossi recuperaron la sonrisa perdida en los últimos meses. Al menos por unas horas. El fin de semana transcurrió bastante bien para los pilotos de Yamaha, que hacía mucho tiempo que no veían la lucha por la victoria más que en las repeticiones televisivas. En esta ocasión fueron testigos de lujo del duelo Márquez-Dovizioso. Sin embargo, sólo pudieron presenciarlo y tampoco se puede saber si fue una mejoría puntual o si tendrá continuidad en Japón; por lo que nada de echar las campanas al vuelo. De momento, mejor mantener los diapasones en tierra.
MotoGP 2018 – Píldoras Tailandia: Guantazo al título, héroe silencioso y una caída feliz
Una caída feliz El título es una exageración. Una caída nunca es feliz. Sin embargo, hay muchas formas de valorar una caída. Cuando
Dani Pedrosa se fue al suelo, lo hizo en el que seguramente estaba siendo su mejor momento desde que anunció su adiós a finales de 2018. Después de varios meses perdido en las medianías de la parrilla, en Buriram había logrado pegarse al grupo cabecero y se postulaba a pelear, como mínimo, por el podio. La hoja de resultados le otorga cero puntos, pero el apartado de sensaciones seguro que le hace sonreír pensando en lo que podrá hacer en trazados propicios como Sepang o Valencia antes de despedirse.
PÍLDORAS EXTRA Lección de respeto Si hubo una victoria realmente aplastante en el primer Gran Premio de Tailandia de la historia no fue la de Márquez ni la de Di Giannantonio. Ni tan siquiera la de Bagnaia, la más contundente de las tres carreras. La victoria más apabullante fue la de
las ovaciones sobre los abucheos a absolutamente todos los pilotos.
Una enorme lección de respeto a los aficionados de circuitos con mucha más tradición como los europeos, y que debería servir para reflexionar y pensar en qué queremos en el motociclismo. Personalmente, me decanto por un motociclismo con batallas espectaculares en pista y donde los aficionados aplauden a todos los pilotos.