Cordero Patagónico
Bien, vamos allá con nuestra primera experiencia gastronómica/receta! A ver qué os parece… Hoy cocinaremos y degustaremos un fabuloso cordero al estilo patagónico. La receta, dado que permite múltiples variaciones, la he visto también con otros nombres como cordero al estilo de la Pampa, asado en cruz o doble cruz, etc. Es una técnica tradicional de América del sur, concretamente de Chile y Argentina donde como ya sabéis la costumbre de asar cortes grandes de carne está bastante arraigada. Bien al lio que me ando por las ramas….
Los materiales que se necesitan son…
■Una cruz de hierro: Esta debe soportar bien el peso del cordero. Allá vosotros con vuestra imaginación. Hay que tener en cuenta que dicha cruz ira clavada en el suelo por lo que el palo largo acabado en punta es de bastante ayuda
■Alambre para diferentes tareas como atar el cordero a los palos, etc…
■Dos ganchos dobles tipo carnicero para enganchar el cordero a la cruz
■Espacio donde hacer un fuego de unos 2m cuadrados y que permita maniobrar alrededor. Pensad que el tamaño del fuego será considerable!
■Leña a punta pala
■Un par de tablas de madera: El objetivo es colocarlas detrás de la cruz donde está el cordero a fin de mantener el calor en la parte que no está apuntando al fuego.
■Lo más importante, el cordero entero: Este debe pesar entre 3 y 5 Kg, si no es suficiente para los comensales mejor coger dos que uno más grande. Lo digo porque a parte de las dificultades que puede suponer maniobrar con un bicho de ese tamaño a temperatura de cocción, la carne nunca es tan tierna. En el caso que hoy nos ocupa pesaba unos 4Kg.
■Sazón de cordero a base de agua, aceite, sal y pimienta. Podemos añadir hierbas aromáticas al gusto o bien utilizarlas como pincel para ir pintando el cordero durante la cocción y evitar que se seque en exceso.
La cocción del animal nos llevo alrededor de 3 horas y media o 4, y a esto hay que añadirle el tiempo de preparación de la zona etc.. Con esta planificacion, nos encontramos a eso de las 10:30 de la mañana. Despejamos la zona de combate y mientras unos apilaban ramas y troncos para el fuego otros disponíamos al animal “en pose de gesta”. Para ello, lo abrimos bien de par en par por el pecho y atamos las patas “dos a dos” a un palo con alambre. La función de dicho palo es tanto sostener el cordero como mantenerle las patas abiertas.
Bien una vez hecho esto debéis clavar la cruz a, como mínimo, unos 50cm del fuego. Más vale que sobre que no que falte, si es menester ya acercaremos el fuego. Acto seguido colocamos los ganchos en el palo que sujeta las patas delanteras del bicho y lo sujetamos al palo horizontal de la cruz. Con el pecho mirando al fuego. Lo siguiente es sujetar mediante alambres el palo de las patas traseras del cordero al palo vertical de la cruz para que el cordero quede pegado a la misma. En este punto, la cruz probablemente venza un poco hacia delante debido al peso para compensar nosotros atamos un alambre a la parte superior de la misma y a una silla de modo que nos permitía graduar la inclinación.