l tamaño del área del fuego es la variable que determina los demás elementos de una parrilla, el conducto de humo, ancho, alto, la boca, la cámara de humo y el tiraje.
La medida mínima de una parrilla es de 1.40 por 1.80 mts., cuando se añada un leñero, se deberán sumar unos 30 cm. más.
Para que el leñero resulte cómodo, y pueda sacarse, conviene que tenga patas de apoyo. En algunos casos, se prefiere hacer una pared de separación entre el leñero y la parrilla, para evitar que las cenizas caigan sobre la comida.
El sector del conducto de humo deberá ser de un mínimo del 10% de la superficie de la boca de la parrilla, es decir, el frente de ésta.
En lo que respecta al tiraje, es fundamental mantener determinadas proporciones entre la parrilla y el conducto de ventilación.
La chimenea tendrá que sobresalir a los cuatro vientos, al menos 1 metro más que los muros o techos cercanos. Además agregando un sombrerete se logra mayor tiraje.
Las parrillas tradicionales están hechas con hierro ángulo, que permite que la carne se marque bien, sobre todo si el material tiene un espesor importante.
Para prevenir rajaduras, como mínimo el sector donde se prepara el fuego debe ser de ladrillo común doble.
Se sugiere la utilización de ladrillos refractarios para ejecutar la parrilla, pues estos resisten mejor las altas temperaturas.
El enlozado de la parrilla facilita la limpieza de la misma, mejor aún si se deja una leve pendiente para que la grasa se deslice. A su vez, elevar un poco la terminación en ladrillo refractario, evita que la grasa de los alimentos caiga fuera de la parrilla.
Se aconseja construir la parrilla desmontable, en dos o tres paños, para lo que se podrán combinar hierros redondos y ángulo.
La mejor opción para la cocción de pollos y lechones es adoptar un mecanismo giratorio, colocando cuatro o cinco sables. De ese modo, la carne se tierniza y desgrasa mejor que con la parrilla tradicional.
Para el mecanismo de elevar la parrilla se pueden utilizar los herrajes del tipo que se emplean para levantar toldos.
A los fines prácticos, se podrá disponer una mesada de apoyo en la misma línea del frente de la parrilla, en su defecto en ángulo a 90º, y para más practicidad agregar una pileta.
Colocar una luz en el interior de la parrilla, en la pared del frente del lado interior, o en el costado opuesto a la esquina donde se prepare el fuego. Es suficiente con un portalámparas reforzado y un cable especial para alta temperatura.
Otra opción para mejorar la funcionalidad de una parrilla, es instalar un mechero, debajo del piso de la losa, con una tapa, pudiendo encender el fuego con gas.
Por último, algo que resulta práctico, es adaptar un cierre a la parrilla, con una puerta levadiza con contrapesos, lo que permite mantenerla cerrada cuando no se la utilice.