Aprilia RSV4 APRC
En el competitivo y voraz mundo de las Superbikes, en los últimos años parece que se están girando las tornas, y la industria y el diseño europeos se están imponiendo al gigantismo de la “intocable” industria japonesa. La mejor muestra de ello es que a la tradicional presencia y siempre posible victoria en el campeonato del mundo de Superbikes de Ducati, el año pasado se sumó de la mejor forma posible la arrebatadamente preciosa e increíblemente efectiva ya en su primer año, Aprilia RSV 4 . Vamos, tan increíblemente efectiva que ganó en manos de un renacido e inspirado-aunque también muy bien apoyado por su excelente moto y su equipo-Max Biaggi.
Como no puede ser otra forma, todos fueron felicitaciones y alegría en la marca y en el grupo Piaggio en general, y como buena fábrica deportiva italiana, rápidamente pasaron a aplicar toda la tecnología desarrollada para el circuito a un modelo réplica Special Edition. Trufada con detalles de última tecnología, y el diseño tan arrebatador que ya conocíamos- y que sigue siendo la más bonita del segmento- es la moto con la que muchos soñaremos, pero que difícilmente tendremos básicamente por dos motivos: su precio y su tirada limitada 350 unidades. No obstante, pude tener mi sueño una semana en el garaje y aquí está la prueba.
Para saber todo sobre las características básicas de esta RSV4, te remitimos a la presentación y a la prueba a la que asistimos en su momento, pero hagamos un repaso rápido. El motor es un revolucionario y compacto V4 a 65°- 5 más que la anterior V2 y 25 menos que el motor Ducati- declara 180 CV , y que este año se ha mejorado ligeramente en cuanto a ajuste y par, porque los proporciona 250 revoluciones antes el año anterior. El chasis es un ultra compacto y precioso doble viga de aluminio, regulable en varios parámetros, y en este caso contamos con una amortiguación completa Öhlins que sería el sueño de cualquiera que disfrute con las motos deportivas, y más si es habitual de los circuitos. Montado sobre ella, jamás dirías que es una superbike, sino más bien una supersport, entre otras cosas por lo compacto de su frontal y lo escueto del colín. Sin duda, la más bonita de todas las 1000.
La arrancas y te pones en marcha. El tacto del V4 es muy especial y requiere bastante tiempo de adaptación . Su forma de entregar la potencia, con una tracción tan controlable y sin el tacto de los más habituales “cuatro en línea” o los generalmente más agresivos y toscos V2, te descoloca al principio. El indicador de marcha insertada es un buen amigo, porque llegas a muchas curvas sin saber cuál tienes engranada. Además, se han modificado las tres primeras relaciones juntándolas, y tiene un tacto que recuerda motor “Crossplane” de la Yamaha R1, donde la tracción combina motricidad con suavidad y potencia de una forma muy particular. De hecho, también en esta Aprilia te encuentras tomando algunas curvas en primera sin el más mínimo problema de brusquedad en la retención-perfecto el embrague antirrebote-y con una tracción y una capacidad de subir de revoluciones simplemente subyugante. Si hablamos de temas más terrenales, el consumo se mantiene en niveles normales, con unos 8 l de media teniendo en cuenta que se incluyen tramos de pilotaje bastante deportivo. En cuanto a la velocidad punta, olvídate de explorar la en carretera abierta si no quieres terminar con tus huesos en la cárcel, pero ronda los 290 km/h … pero es que ya en primera sería muy fácil sobrepasar el límite de velocidad, lo que no sé si es una loa para el motor u otra crítica a la ridícula velocidad máxima que tienen las carreteras en este país actualmente.
¿Y la estabilidad? ¿Qué quieres que te cuente de la estabilidad? Te aseguro que la sensación de docilidad y casi de ingravidez se consigue esta RSV es de ensueño . Curvas rápidas con el acelerador conectado a tu mente y el chasis, para salir a una recta roscando el puño derecho sin piedad y con la confianza que toda la electrónica desarrollada con cuidado por los chicos de Aprilia te salvará de perder tracción en la rueda trasera, de que la delantera pierda contacto con el suelo, y además puedes ir subiendo marchas sin soltar ni un grado de puño. Una sensación digna de las mejores escenas de Matrix.
¿Y cuál ha sido realmente la evolución de este modelo frente al que probamos el año anterior? Pues aquí tienes los detalles que la diferencian:
APRC de serie, alimentación con trompetas de altura variable, gestión de la válvula de escape, chasis regulable en tres puntos, horquilla con amortiguador trasero y de dirección Öhlins multirregulable, llantas de aluminio forjado, piezas de carbono y, como guinda final, diseño especial tricolor celebrando la histórica victoria de la marca en el mundial de Superbikes.
Claro que desde el principio de esta lista te habrás preguntado una cosa: ¿qué demonios es el APRC? Pues son las iniciales de Aprilia Performance Ride Control- vamos, lo que en cristiano vendría a ser algo así como Control Aprilia de Pilotaje de Altas Prestaciones- que es básicamente un paquete de gadgets electrónicos que comprenden:
ATC: Aprilia Traction Control (Aprilia Control de Tracción). El control de tracción que se calibra automáticamente según los distintos tipos de neumáticos y que además regulable en marcha, sin necesidad de cerrar el acelerador, con ocho niveles de regulación gracias a un práctico joystick emplazado en el lado derecho del semimanillar.
AWC: Aprilia Wheelie Control (Aprilia Control de Wheelie) , el sistema de control de levantada de rueda (wheelie ) regulable en tres niveles.
ALC: Aprilia Launch Control , el sistema de ayuda en la salida de las carreras, para uso exclusivo en circuito, regulable en tres niveles.
AQS: Aprilia Quick Shift : cambio semiautomático, para subir de marchas rápidamente sin tener que cerrar el acelerador y sin emplear el embrague. El menos tecnológico de todos, puesto que son ya varias las motos que lo incorporan, además de ser un complemento bastante habitual en motos deportivas… pero vamos…que es necesario en una moto tan extrema como esta.
Bueno, como verás la tecnología electrónica campan a sus anchas en esta Aprilia. Pero eso no es lo mejor, sino que además todo lo que promete es verdad. Cierto que necesitas un período de “aprendizaje” tanto para aprovechar sus ventajas- bueno, para esto necesitarías años, ganas, entrenamiento y capacidad de piloto- , como para navegar y regular los distintos niveles. Por otro lado, también puedes elegir entre dos tipos de pantallas, una más enfocada la carretera y otra más al circuito, con las revoluciones, los niveles de los sistemas electrónicos y la marcha engranada muy destacados. Por supuesto, todo digital y muy futurista, y con clara inspiración en los cuadros de superbike y MotoGP.