Específicamente, la GTR 215 se basa en la premiada plataforma GTi de la marca canadiense, cuyas bondades permiten digerir los 215 caballos del motor Rotax 4-TEC sobrealimentado sin comprometer la maniobrabilidad y ofreciendo un paso sobre las olas seguro y cómodo.
Su potente motor turbo de 1,5 litros hace que sea una moto lista para correr, por lo que se ofrecen muchos accesorios para personalizarla. Además, destaca su capacidad de carga: casi 117 litros entre el hueco bajo el asiento y otro en el frontal.
Aunque este modelo no vive solo de la deportividad. De hecho, el precio –15.199 euros– se antoja más atractivo cuando echamos un vistazo a toda la tecnología embarcada. Por ejemplo, el afamado sistema iControl, una especie de cerebro que controla y optimiza la navegación a base de dispositivos como el VTS, e iTC o el iBR.
El primero es un sistema eléctrico que permite variar, de forma muy rápida, la inclinación de la moto para ganar en estabilidad o aceleración. El segundo es un control inteligente de la aceleración que permite a los noveles no llevarse sustos al tener limitada la velocidad. Y el tercero, que nos parece bastante más interesante, agrupa el freno y la marcha atrás.
El freno funciona al invertir el sistema de propulsión haciendo que la moto, prácticamente, se detenga dentro del agua. Sea-Doo asegura que hasta 30 metros antes que la competencia. Asimismo, permite una excelente maniobrabilidad en el atraque, apoyada esta función siempre con la marcha atrás.
La moto también cuenta con otro sistema que eleva la protección del motor al recurrir a un sistema de enfriamiento a base de líquido refrigerante, en lugar de la corrosiva agua salada del mar.
Con una estética muy conseguida, en la que las bandas de color naranja hacen un guiño a la competición, la GTR 215 puede transportar a tres personas con mucho confort también gracias a una aerodinámica muy cuidada.
El conductor tiene manillar ajustable y disfruta de un soberbio cuadro de instrumentos, totalmente digital, que ofrece información de todo tipo: velocidad a la que circulamos (la punta es de 80 km/h), si vamos con el modo deportivo, Eco o de paseo, brújula, regulación del sistema VTS de inclinación, contador de horas, indicador de punto muerto y marcha atrás y, así, hasta 24 funciones diferenciadas de información.
Tiene detalles de acabado realmente bien estudiados como son las alfombrillas laterales, a todo lo largo del interior del casco, que facilitan la subida o bajada de la misma impidiendo los peligrosos resbalones.