Grandes batallas de la Historia de EspañaBatalla de Almansa - 1707
La batalla de Almansa es una de las más célebres de la Guerra de Sucesión (1700-1714). Abrió las puertas del Reino de Valencia al ejército borbónico, que más tarde terminaría conquistando las Baleares y Cataluña. Después de la batalla Felipe de Anjou ordenó ocupar Valencia por las buenas o por las malas. La conquista de Játiva fue por las malas. El rey la sitio y le costó tanto tomarla que mandó que sus tropas la incendiasen. Los setabenses se vengaron siglos después colgando su retrato del revés, estado en el que, a día de hoy, permanece en un museo de la ciudad.
Grandes batallas de la Historia de EspañaBatalla de Trafalgar - 1805
La de Trafalgar, librada frente a las costas de Cádiz en 1805, supuso el canto del cisne del poderío naval español. El país sacrificó su flota, una de las más grandes de la época, para cumplir los deseos de Napoleón, que aspiraba a invadir Inglaterra. La combinada francoespañola perdió 22 navíos de línea y más de tres mil hombres. El que también murió fue el almirante Horatio Nelson lo que le convirtió en un héroe en el acto. La Armada española no se recuperaría del golpe. Pocos años después las colonias americanas declararon la independencia y España apenas tenía barcos para transportar tropas. Su influencia a largo plazo fue tal que Trafalgar es una de las grandes batallas no ya de la historia de España, sino de la historia universal.
Grandes batallas de la Historia de EspañaBatalla de Bailén - 1809
Cuando Napoleón ordenó invadir España no podía ni imaginar que al otro lado de Sierra Morena le esperaba un ejército preparado para el combate como el que comandaba el general Castaños. A mediados de 1809 el general Du Pont abandonó Madrid para conquistar Andalucía y rescatar la flota francesa que se encontraba apresada en Cádiz. En Bailén un ejército de 27.000 hombres con 25 cañones se lanzó sobre él y su tropa. La derrota francesa fue total y la primera que cosechó la Armée napoleónica en toda Europa. El descrédito obligó a José I a irse de Madrid y a Napoleón a venir personalmente a España a rematar una conquista que él creía fácil.
Grandes batallas de la Historia de EspañaBatalla de Ayacucho - 1824
Ayacucho, una pequeña ciudad peruana, fue testigo del fin del imperio español en América. España había ido perdiendo desde 1810 colonia tras colonia en América a causa de levantamientos por parte de las élites gobernantes. El último virreinato en perderse fue el del Perú. Una alianza del Río de la Plata, Chile y la Gran Colombia derrotó al ejército realista comandado por su último virrey, el jerezano José de la Serna. Después de Ayacucho los realistas volvieron a España o se avinieron a vivir en las recién nacidas repúblicas. De todo el tesoro americano sólo Cuba y Puerto Rico se salvaron, y no por mucho tiempo.
Grandes batallas de la Historia de EspañaBatalla de Santiago de Cuba - 1898
En 1898 el Gobierno envió una escuadra naval a Cuba a presentar una batalla que sabía que tenía perdida de antemano. La comandaba el almirante Cervera, que buscó refugio en el puerto de Santiago de Cuba. Fuera le esperaban dos flotas al mando del almirante Sampson. Se esperaba una derrota y así sucedió. El 3 de julio Cervera dio la orden de salir a mar abierto donde estaban esperando los buques americanos que cañonearon a los españoles sin piedad según iban saliendo por la bocana. Para evitar una carnicería inútil Cervera ordenó dirigirse a la línea de costa y embarrancar los buques. Al regresar a España Cervera fue juzgado por su actitud poco gallarda en la batalla.
Grandes batallas de la Historia de EspañaBatalla del Ebro - 1938
La del Ebro, librada en el verano y el otoño de 1938, fue la mayor, la más larga y la más sangrienta de la Guerra Civil. En abril de 1938 los nacionales partieron la zona republicana en dos. El Gobierno del Frente Popular trató de retomar la iniciativa atacando por el curso bajo del Ebro. En la batalla se enfrentaron casi 200.000 hombres (100.000 republicanos y 98.000 nacionales) auxiliados por cerca de 700 piezas de artillería y más de 500 aviones. Los republicanos contaban, además, con 120 carros de combate y vehículos blindados. Por sus dimensiones podría haber sido una batalla de la II Guerra Mundial, pero tuvo lugar en uno de los meandros del Ebro antes de su desembocadura. La victoria nacional terminó de decidir la guerra. Franco tomó primero Cataluña y, poco después, Madrid y la costa levantina.
Combarro y sus mariscadorasHórreos en la costa
El delicioso casco viejo de Combarro destaca por el gran número de hórreos, algunos muy antiguos y al borde del mar como el de la imagen
Combarro y sus mariscadorasMarisqueando con la marea baja
Al bajar la marea el tramo de ría frente a Combarro se convierte en una zona idónea para el marisqueo
Combarro y sus mariscadorasEntre la tierra y el agua
La marea baja abre un territorio a mitad de camino entre la ría y la tierra, que ni es una cosa ni la otra
Combarro y sus mariscadorasDe madera
Algunos hórreos son de madera aunque normalmente se sustentan en pilastras de piedra
Combarro y sus mariscadoras¡Y aún dicen que el marisco es caro!
El trabajo de las mariscadoras es realmente duro, incluso en los días más amables y soleados
Combarro y sus mariscadorasEntre el fango
Otra imagen que muestra bien a las claras la dureza del trabajo que hacen las mariscadoras
Combarro y sus mariscadorasBarcas junto al puerto
Combarro tiene un puerto pequeño en el que se pueden ver algunas barquitas
Combarro y sus mariscadorasSobre plata
El sol da en el fango húmedo de la ría, que adquiere un tono brillante como de plata
Combarro y sus mariscadorasLa pequeña iglesia de Combarro, de piedra y húmeda, como corresponde en Galicia