El nuevo camión FH de Volvo Trucks no es Bourne, pero sí es un mito que renace con la misma fuerza con la que hace veinte años revolucionó el sector del transporte pesado. Como el espía del film, el nuevo FH hace gala de una memoria que le sirve para lograr un ahorro de combustible de hasta el 5% con respecto a su predecesor.
Esto es gracias a su tecnología I-See, un software que almacena información sobre las pendientes en su memoria. Cuando vuelve sobre esa misma ruta, el FH “recuerda” los datos sobre aceleración, velocidad y uso del freno, que este sistema de piloto automático aplica, para optimizar su marcha y garantizar las máximas economías de combustible.
Como el agente, hace uso intensivo de las nuevas tecnologías, pues ofrecerá desde otoño de 2013 un paquete denominado Combustible, que conecta el camión con el taller. Así, se obtiene una telemetría con la que mensualmente Volvo ofrece formación al conductor sobre cómo usar el combustible de la manera más eficaz.
Además, está la nueva línea motriz I-Torque, que ya se acomoda a la normativa de emisiones Euro 6, y con la que reduce el consumo hasta en un 4%. I-Torque, que comenzará a producirse en otoño de 2013, permite también una conexión remota que facilita al taller la supervisión a distancia del estado del vehículo y de sus componentes, evitando problemas y logrando que las visitas al taller se programen con antelación, cuando más convenga a la empresa de transporte.